

De acuerdo con una encuesta realizada porYouGov, en Alemania el 54% de las personas usa el celular mientras está en el baño, especialmente cuando están sentadas en el inodoro.
Lo sorprende es que no se trata de una actividad que lleva unos pocos segundos. De hecho, gran parte de los usuarios consultados reconocieron que pasan más tiempo del que creían haciéndolo.

Por qué usar el teléfono en el inodoro podría ser peligroso para tu salud
Los especialistas advierten que permanecer demasiado tiempo sentado en el inodoro puede favorecer la aparición de hemorroides. Esto se debe a que la postura prolongada y la relajación del suelo pélvico incrementan la presión sobre los vasos sanguíneos de la zona.
Un análisis reciente de la Harvard Medical School, publicado en la revista PLOS One por el equipo de Trisha Pasricha, refuerza esta preocupación. La investigación incluyó a 125 adultos y halló una correlación significativa: las personas que utilizaban el teléfono móvil en el baño tenían un 46 % más de riesgo de desarrollar hemorroides en comparación con quienes no lo usaban.
Por qué las personas usan el celular en el inodoro
De acuerdo con el estudio, la actividad más común de los usuarios que usan el celular en el inodoro es leer noticias (54%), seguida de interactuar en redes sociales (44%).
La higiene del smartphone: un riesgo silencioso en el uso del baño
Más allá de los problemas de salud asociados con permanecer demasiado tiempo en el inodoro, existe un aspecto frecuentemente ignorado: la higiene de los dispositivos móviles. Aunque para muchos resulta desagradable imaginarlo, el uso del teléfono en el baño implica una exposición directa a microorganismos potencialmente nocivos.
Un relevamiento de YouGov muestra que solo el 39 % de los usuarios desinfecta su smartphone después de usar el sanitario, con una mayor proporción de mujeres que hombres (44 % frente a 33 %).
Si bien los teléfonos no constituyen un entorno óptimo para la proliferación de bacterias, algunos gérmenes -incluidos los de origen fecal- pueden permanecer adheridos a su superficie y multiplicarse. Por ello, los expertos recomiendan adoptar hábitos preventivos.















