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Vivir en la Ciudad de México es cada vez más costoso. En promedio, una casa o departamento cuesta más de 3.8 millones de pesos, de acuerdo con datos de la Sociedad Hipotecaria Federal.

Para comprar una vivienda con crédito hipotecario, una persona tendría que ganar más de 100 mil pesos mensuales, algo que sólo una mínima parte de la población puede lograr.

¿Quién puede comprar? Casi nadie

Un análisis de 4S Real Estate revela que solo 8 de cada 100 habitantes pueden pagar el 85% de las casas disponibles en el mercado.
Esto significa que la ciudad crece, pero deja fuera a la mayoría, especialmente a quienes no tienen ingresos altos ni acceso a créditos grandes.

La gentrificación ya es un problema urgente

La reciente marcha contra la gentrificación reflejó el malestar social por la expulsión de los habitantes originales de muchas colonias.
El suelo se ha vuelto una mercancía y la construcción de vivienda se concentra en zonas donde ya no vive quien más la necesita.
Expertos alertan que la ciudad está dejando de ser para todos y sólo beneficia a quienes pueden pagar más.

¿Qué propone el gobierno de la CDMX?

La jefa de gobierno, Clara Brugada, impulsa una estrategia de redensificación, es decir, construir viviendas en zonas ya urbanizadas para evitar la expansión hacia las periferias.
El plan incluye usar terrenos subutilizados, construir edificios más altos y atraer inversión privada bajo reglas claras que garanticen vivienda asequible.

Ya se han aprobado 4,000 nuevas viviendas a través de una "Ventanilla Única", y se espera una inversión de 20 mil millones de pesos en los próximos meses.

¿Por qué importa esto?

Porque si no se corrige el rumbo, vivir en la Ciudad de México será un lujo imposible para millones de personas.
Además, seguir desplazando a las familias más vulnerables genera más desigualdad y fragmentación social.

Vivir en la CDMX ya no es opción para todos. El precio de la vivienda sube, el suelo se mercantiliza y las soluciones apenas empiezan a discutirse. Lo que se decida hoy puede definir si mañana la ciudad será habitable... o sólo para unos pocos.