Durante la temporada de lluvias, las calles de la Ciudad de México pueden convertirse en ríos en cuestión de minutos. Y aunque muchos automovilistas creen estar protegidos por tener una póliza "amplia", la realidad es que no todas cubren daños por inundaciones.
Mover un auto dañado, no reportar a tiempo o no tener la cobertura adecuada puede convertir un siniestro en un fuerte golpe financiero.
Lo que debes revisar hoy en tu póliza
Antes de asumir que tu coche está protegido, verifica estos puntos:
Cobertura por fenómenos hidrometeorológicos: no siempre viene incluida.
Deducibles y exclusiones: saber cuánto pagarías y qué eventos no cubre tu seguro.
Protocolos del seguro: documentar con fotos, videos y evitar acciones que puedan complicar la evaluación del daño.
Un mal día puede afectar tus finanzas por años
Un coche dañado por lluvia sin seguro adecuado puede representar pérdidas de miles de pesos, falta de movilidad por semanas y complicaciones legales o técnicas con tu aseguradora.
