Los 5 hábitos después de los 40 años que debés mantener para preservar el bienestar físico y no acelerar el envejecimiento

A los 40 años los cambios físicos comienzan a ser más evidentes. Por eso, mantener ciertos hábitos saludables es vital para la no acelerar el envejecimiento y para preservar el bienestar físico.  

En esta etapa de la vida, la piel se vuelve más fina, la masa muscular disminuye, perder peso se convierte en un reto mayor y la recuperación de las lesiones se vuelve más lenta. 

Sin embargo, existen hábitos que, adoptados a tiempo, pueden contrarrestar estos efectos y ayudarnos preservar nuestra salud y bienestar. 

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40 años: 5 hábitos para mantener un buen estado físico y evitar el aceleramiento del envejecimiento

El portal de Alimente +, dio a conocer 5 hábitos fundamentales que los expertos recomiendan para no acelerar el envejecimiento y asegurar una vida saludable después de los 40 años.

1. Alimentación

La alimentación es uno de los principales elementos a vigilar. Los nutricionistas recomiendan que, al alcanzar la edad de los 40 años, seamos aún más estrictos con limitar al máximo en nuestra dieta la carne roja, la sal, las grasas saturadas y los azúcares. 

2. Hidratarse correctamente

A partir de los 40, es aún más importante escuchar a nuestro cuerpo y beber agua siempre que tengamos sed, para ayudar a nuestra piel, que se seca más fácilmente y se vuelve menos elástica.

• Se recomienda que los adultos beban entre 2 y 2,5 litros de agua diarios.
  
  
• Algunos expertos aseguran que cada persona tiene necesidades diferentes y que hay que "beber agua cada vez que te lo pida el cuerpo". 

3. Ejercicio físico

El ejercicio físico es otro de los pilares fundamentales. Un estilo de vida sedentario puede pasarnos factura a esta edad y aumentar el riesgo de desarrollar enfermedades.

Por eso, se debe:

• Mantenerse activo.
• Realizar rutinas de ejercicios 3 o 4 días a la semana.
• Evitar prácticas demasiado exigentes para prevenir lesiones y problemas de salud.

4. Buen descanso

Además de alimentarse e hidratarse bien y de hacer suficiente ejercicio, también es crucial descansar correctamente. 

• Es necesario dormir como mínimo 7 horas cada noche.
  
  
• Nuestro cuerpo debe recuperarse de las actividades diarias y obtener energías para la siguiente jornada. 
  
  
• Hay que dormir en un espacio y en un colchón apto que nos permita un sueño de calidad, con rutinas horarias lo más fijas y saludables posibles.

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5. Cuidar la higiene

Por último, cuidar la higiene se vuelve más importante al alcanzar esta edad. La piel es ahora más fina y delicada, por lo que es una buena idea utilizar productos que la protejan.

Se puede optar por cremas hidratantes y soluciones que le otorguen luminosidad a la piel, sobre todo, si nos preocupa nuestra imagen.