

Una cadena francesa de restaurantes de comida rápida está en problemas desde que anunció que algunas de sus sucursales servirían sólo hamburguesas halal para atraer a más clientes musulmanes.
El experimento de Quick ha desatado una tormenta de protestas por parte de los políticos, que dicen que la compañía está infringiendo la tradición de Francia. En ocho restaurantes se está sirviendo sólo carne de vaca faenada según la práctica islámica y todos los productos derivados del cerdo han sido sacados del menú.
La pelea se enfoca, una vez más, en la sensibilidad que los franceses tienen sobre lo que significa vivir con una población de cinco millones de musulmanes.
El alcalde de Marsella,de centroderecha, pidió a Quick que ofrezca tanto carne común como la variedad halal en los dos restaurantes de la ciudad que fueron parte del experimento.
Bruno Le Maire, el ministro de Agricultura de Francia, se involucró en la pelea acusando a la cadena de communautarisme –que significa aproximadamente: dividir al país en comunidades étnicas separadas–, y de actuar “contra los principios y el espíritu de la República .
La táctica de marketing de Quick ha sido el último tema de un fuerte debate iniciado el año pasado por el gobierno de centroderecha sobre la identidad nacional de Francia; debate que se ha centrado en los efectos de la inmigración y su potencial impacto en la unidad de Francia.
Los críticos dicen que el debate de identidad nacional fue lanzado por el presidente Nicolás Sarkozy el año pasado, y que deliberadamente lo guió al problema de la inmigración como una manera de conseguir apoyo entre los votantes de derecha en las difíciles elecciones regionales que se realizarán el próximo mes.
Algunos políticos han hecho un llamado para aplicar una mayor moderación cuando se discuten estos problemas. Christian Vanneste, un diputado de centroderecha del norte de Francia, dijo que le gustaría que “a estas anécdotas se les diera la importancia que se merecen, que ahora son nulas .
El crecimiento de la comida halal se ha convertido en un gran negocio en Francia. Según la consultora Solis, el mercado de carne halal moverá 5.500 millones de euros (u$s 7.500 millones) este año, el doble del mercado de comida orgánica.










