

Los depósitos a plazo fijo registraron en febrero un importante crecimiento, impulsando así a las colocaciones totales del sector privado, que en los primeros 25 días del mes subieron en $ 622 millones.
A diferencia de lo ocurrido en enero, cuando los inversores se volcaron de lleno a los depósitos ajustables por CER, en febrero la mayor parte del dinero que entró a los bancos fue a tasa fija. De todos modos, esto no responde a un cambio de tendencia de los inversores sino a una política de algunos bancos de no tomar depósitos con CER.
Según los datos del Banco Central, al 25 de febrero los depósitos a plazo fijo crecieron
$ 1.151 millones y el stock se ubicó en $ 28.262 millones. En el mismo lapso de tiempo los depósitos indexados tuvieron una suba de $ 182 millones, muy por debajo de los $ 1.056 millones que habían crecido en enero.
“Después de diciembre y enero, dos meses en que por cuestiones estacionales aumenta el efectivo en poder del público, el dinero empieza a volver a los bancos. Y con el dólar en baja, los inversores minoristas, menos sofisticados, ponen su dinero en los plazos fijos , explicó Rodolfo Daza, director financiero del Société Générale.
Y si bien la preferencia de los ahorristas apunta a los depósitos indexados, no todos los bancos ofrecen este producto. “No es negocio para los bancos porque al no haber préstamos con CER no tenemos donde colocar ese dinero , señaló Daniel Cecchini, director comercial del Banco Industrial, quien reconoce que “nosotros lo ofrecemos a los clientes más que nada para darle un servicio .
Apuestas a la inflación
Además, la decisión del Central de extender de 6 a 9 meses el plazo mínimo de estas colocaciones también desincentivó a varios inversores, que aún se muestran reticentes a inmovilizar su dinero por tanto tiempo.
Hasta hace algunos meses los bancos ofrecían los depósitos indexados para poder calzarlos en sus balances con los préstamos garantizados y así equilibrar sus activos y pasivos que se devengan CER. Pero la inflación de los últimos meses hizo que sea más rentable para los bancos estar descalzados en materia de CER y contar con más activos que pasivos indexados.
Por otro lado, las entidades no sólo tienen pocas aplicaciones para los plazos fijos indexados, sino que además deben pagar un costo demasiado alto.
Para Gustavo Massaro, gerente de productos de inversión y crédito del Banco Río, el buen recorrido que transitó el canje de la deuda soberana también sirvió para impulsar los depósitos. “Pareciera que la buena adhesión que parece tener el canje trajo un poco más de confianza en el sistema , destacó.










