Más de la mitad de las mujeres más ricas del mundo son chinas, debido, en parte, a que a la hora de ceder el cuidado de los hijos, ellas reciben más ayuda y deben pagar menos, según el informe de Hurun, firma especializada en la elaboración de ránkings sobre el progreso de los ciudadanos chinos.

Las tres más adineradas del mundo tienen esa nacionalidad (al igual que 11 de las 20 primeras clasificadas), según la lista de mujeres que por propio esfuerzo se convirtieron en multimillonarias. Se trata de un estudio que elabora Hurun todos los años.

Zhang Yin, de 53 años, es la responsable de la compañía de papel reciclado Nine Dragons Paper y ocupa el primer puesto del ranking, con una fortuna personal estimada en u$s 5.600 millones (4.015 millones de euros).

La medalla de plata es para Wu Yajun (46 años) directora de la inmobiliaria Longfor Property, con un patrimonio de u$s 4.100 millones, mientras que Chen Lihua (69 años), que trabaja en Fuhua International, un conglomerado de Hong Kong, se ubica en la tercera posición con u$s 4.000 millones.

La mujer no china más rica del mundo es la española Rosalía Mera, ex esposa del fundador del imperio textil Inditex dueño de Zara, Amancio Ortega, con u$s 3.500 millones.

Junto a ella aparecen otras dos empresarias del sector de la moda: Doris Fisher, de GAP, en la octava posición; y la italiana Giuliana Benetton, en el undécimo lugar.

La estrella de la televisión estadounidense, Oprah Winfrey, se sitúa en la novena posición, con u$s 1.649 millones. Y el vigésimo lugar es para la autora de Harry Potter, Jk Rowling.

Nandani Lynton, de la escuela de negocios China Europe International en Shanghai, ha identificado factores políticos y sociales en el ascenso de las chinas dentro del club de las más ricas frente a las decanas de Zara, GAP, Benetton y eBay.

“Mao hizo una increíble distinción cuando dijo que las mujeres controlaban la mitad del cielo. Desde entonces, se asumió que todas las mujeres de China trabajarían , aseguró Lynton.

Asimismo, las féminas chinas se encuentran entre las más ambiciosas del mundo, según un informe del Centre for Work-Life Policy de Nueva York, que revela que el 76% de ellas aspira a ocupar puestos de primer orden, frente al 52% de las mujeres de Estados Unidos.