La liquidez del sistema financiero se mantiene desde hace varios meses estable: los bancos tienen hoy cerca del 23,2% de sus depósitos en pesos en recursos líquidos, el mismo nivel que registran desde mediados de 2004. De todos modos, la distribución cambió: hasta noviembre del año pasado eran los bancos públicos los que, gracias al abultado superávit fiscal, disponían de mayor liquidez, mientras que hoy son las entidades privadas las que se encuentran en una situación más holgada.

Según el último informe monetario del Banco Central, desde el mes de octubre los bancos privados tuvieron un alza de cinco puntos porcentuales en el ratio de liquidez (esto es la sumatoria de las cuentas corrientes en el BCRA, efectivo en bancos y pases pasivos concertados con el Central, en relación a los depósitos totales en pesos), pasando de cerca del 20% a casi el 25%. Del otro lado, las entidades públicas redujeron en los últimos tres meses cuatro puntos porcentuales su ratio de liquidez, y ahora tienen un poco más del 20% de sus depósitos en activos líquidos.

“La mayor liquidez de las entidades privadas se debe básicamente a que crecen en depósitos, pero como aún hay poco crédito, los bancos no tienen demasiadas aplicaciones para su dinero , explicó Ana Gavuzzo, analista de bancos de FitchRatings Argentina. En la misma línea se mostró Lucas Videla, de la gerencia de planeamiento del Banco Río, quien aseguró que la recuperación de los depósitos es el principal motor que inyectó una fuerte dosis de liquidez a los bancos privados.

Para Daniel García, subgerente de estudios económicos del Banco Ciudad, la recuperación de la liquidez por parte de los bancos privados comenzó en el tercer trimestre del año pasado, “cuando comenzaron a bajar su tasas de fondeo .

En cambio, lo que explica la pérdida de liquidez en las entidades estatales es la mayor demanda de fondos por parte del Tesoro, que recurrió a sus depósitos en el Banco Nación tanto para realizar pagos a organismos internacionales de crédito como para comprar dólares en el mercado cambiario (y así sostener el dólar y acumular fondos para futuros pagos). “La fuerte participación del Nación en el mercado cambiario produjo una baja en los depósitos del sector público y eso impactó en la liquidez , destacó el economista Miguel Kiguel, titular de Nuverse Financial.

Además, la baja en los depósitos del sector público hizo que las entidades oficiales reduzcan su participación en pases, que se contabiliza como uno de los activos líquidos. En octubre, por ejemplo, seis de las siete entidades que más operaron en la rueda de pases eran públicas, mientras que en febrero sólo había dos bancos oficiales entre los siete más activos del sistema.

“El nivel actual de liquidez del sistema es un logro para la Argentina pero es mínimo en comparación con el resto del mundo , señaló el economista Oscar Cuattromo, ex director del Banco Provincia.