La filial argentina de la empresa alemana Knauf, fabricante de productos para la construcción en seco, invirtió 20 millones de pesos en la ampliación de su planta, ubicada en el Parque Industrial de Luján de Cuyo, en Mendoza.

El desembolso tuvo como destino el incremento de la capacidad en el proceso de secado de las planchas de yeso –la rama más significativa de la compañía–, que trabajaba a full desde fines de 2005. Además, se ampliaron los depósitos.

“Precisábamos hacerlo porque nos lo exigía el crecimiento de la demanda interna y externa. El último año tuvimos una producción de 8,5 millones de metros cuadrados (m2) de placas. Con la ampliación lograremos llegar a los 14 millones , explicó César López, gerente General de Knauf.

En la planta de Mendoza, inaugurada en junio de 2001 con una inversión de u$s 41 millones, también se producen perfiles metálicos y placas texturadas para cielo raso.

Con este plan en marcha, la compañía también espera elevar un 20% su facturación este año. En 2005, los ingresos de Knauf en el país alcanzaron los $ 46 millones.

Fronteras afuera

La ampliación de la planta mendocina también le significará a Knauf la posibilidad de incrementar su participación en los mercados externos.

En la actualidad, las exportaciones representan cerca del 50% de la facturación total. “Dentro de ese porcentaje, Chile se lleva nada menos que el 30% , indica López. El resto se lo reparten entre países como Colombia, Bolivia, Paraguay y Uruguay. En la Argentina, la firma germana cuenta con 240 clientes, básicamente revendedores o instaladores de los sistemas que comercializa Knauf.

El objetivo de la compañía a nivel local es lograr lo que se impuso hace tiempo en otros países. “Queremos reemplazar a la construcción tradicional, la de los ladrillos, por la construcción en seco , dice López.

Para reforzar esta idea, el directivo señala que, de 2004 a hoy, la industria de la construcción “avanzó un 20%, el doble que la tradicional .

El mercado

Según sus estimaciones, este negocio mueve al año cerca de $ 100 millones. El principal competidor de Knauf a nivel local es la marca Durlock –perteneciente al grupo belga Etex–, que controla el 50% del mercado argentino.