

La cantidad de administradores de fondos que predicen que la economía global empeorará durante los próximos 12 meses ha caído al nivel más bajo desde que la crisis se disparó, según una encuesta de Merrill Lynch.
La encuesta mensual a 177 inversores institucionales, que en total controlan activos por valor de u$s 599.000 millones, mostró que en febrero solamente el 6% de ellos pronosticó una economía en deterioro –el nivel más bajo desde julio de 2007– en comparación con el 60% de octubre pasado.
Esta ola de optimismo se debe a las mejores perspectivas de crecimiento de China, según Merrill Lynch. El número de administradores de fondos que anticipan una crisis prolongada para la tercera economía más importante del mundo se redujo de 70% a 21 %, en relación con el mes pasado.
Pero si bien hubo más sentimientos de optimismo, la continua aversión al riesgo de los inversores se hizo más evidente por el aumento de la cantidad de administradores con sobreponderación al dinero en efectivo.
En Europa, esta preferencia por el efectivo alcanzó su máximo pico desde el período subsiguiente a los ataques al World Trade Center, en 2001.
También existen marcadas divergencias en los pronósticos regionales, con una reactivación de la demanda de acciones estadounidenses pero una reducción en el número de administradores de fondos que creen que las acciones europeas están subvaluadas. El entusiasmo por los papeles japoneses también disminuyó.










