El Banco Provincia de Córdoba ya puso en marcha el proceso para abrir su capital a inversores privados, como parte del Plan de Saneamiento que fue aprobado por el Banco Central. Como primera medida se llamará a licitación para hacer un aporte del 40% del capital ($ 90 millones), operación que se estima se realizará a finales de este año y para lo que ya hay dos interesados: Jorge Brito, presidente del Banco MacroBansud y Enrique Eskenazi, titular del Nuevo Banco de Santa Fe.
“Si bien quien aporte el capital tendría la minoría accionaria, se hará cargo del management, como es el caso del Hipotecario , explicó Daniel Perrotta, gerente general del Banco de Córdoba.
Y tanto para Brito como para Eskenazi, capitalizar la entidad cordobesa implicaría un importante paso para fortalecer su posición en el interior del país. Por un lado, el MacroBansud concentraría así gran parte del negocio bancario de la provincia, después de haber adquirido hace unos meses atrás el Nuevo Banco Suquía, principal competidor del Banco de Córdoba. Del otro lado, para Eskenazi esta operación significaría además un gran avance en materia política. Pasa que el grupo que lidera Enrique Eskenazi, que ya controla el Banco de San Juan y el de Santa Cruz, apuesta a una regionalización de la banca privada y al trabajo en conjunto con los estados provinciales a través de la Banca Regional Centro, una asociación que lleva adelante junto con el Gobierno de Santa Fe y el de Entre Ríos.
Los próximos pasos
De todos modos, aún falta bastante tiempo para que comience el proceso de licitación. La definición de las condiciones y la elaboración de los pliegos está prevista para el segundo semestre de 2005, quedando la licitación para los últimos meses del año. En ese marco, y considerando los plazos necesarios para abrir el período informativo (show room), las calificaciones, adjudicaciones y la elaboración de estados contables se estima finalizar recién en la segunda mitad de 2006.
Además de la capitalización, el Banco Central también puso tres condiciones más dentro del plan de reestructuración que fue aprobado en enero. Uno de los pedidos es un aporte de capital de la Provincia de Córdoba de $ 90 millones, fondos que se esperan provengan a través de un crédito del Banco Mundial. La segunda exigencia es que el banco venda todos los inmuebles que no están afectados al giro (o sea que no sean sucursales), lo que servirá para darle una inyección de cerca de $ 80 millones. Por último, se deberá hacer una operación que implica modificar el rendimiento del fideicomiso Córdoba Bursátil (contiene una cartera de créditos irregulares) para que en lugar de devengar un interés del 2% anual rinda esa tasa más CER.
Con todo esto, el Banco de Córdoba se prepara para fortalecerse en la región después de cerrar el 2004 con ganancias por primera vez en 10 años. Además, no sólo ganó $ 1,5 millón en ese año sino que comenzó 2005 con la misma tendencia cerrando enero con un resultado positivo de $ 6,4 millones.
