Este viernes es un día clave para monitorear cómo terminó el saldo de compras o ventas de dólares por parte del Banco Central, porque empezarán a acceder al MULC los importadores de alimentos, productos farmacéuticos y resto de bienes (excluyendo energía y autos) que pidieron las primeras SEDI (reemplazan las SIRA) el 27 de diciembre. Con respecto al resto de los bienes, se les darán las divisas por el 25% de lo importado, mientras que el 75% restante se le otorgará en tres partes iguales a los 60, 90 y 120 días. Desde el 13 de enero quienes tenían SIRAs aprobadas que nacionalizaron las mercaderías después del 13 de diciembre, ya tienen acceso al MULC, ya que la comunicación del BCRA fue el 13 de diciembre y debían esperar 30 días. Lo cierto es que la continua apreciación del tipo de cambio real, que según estimaciones del Banco Central se apreció un 23% desde el máximo observado el 13 de diciembre, todavía no afecta el ritmo de compras del BCRA en un contexto de demanda escalonada de importadores. "La capacidad de seguir acumulando reservas en los próximos meses será el test fundamental que deberá superar el crawling peg para mantener el ritmo actual del 2% mensual. El acuerdo con el FMI compromete al Gobierno a acumular u$s 10.000 millones de reservas netas este año", advierten en Delphos Investment. Un dato clave para los importadores es cómo le va al Bopreal, que el martes comenzó a operar con mayor volumen, cotizando en niveles cercano a los u$s 0,65. Este precio sitúa el rendimiento del título en 19% anual, ubicándose entre la curva soberana y subsoberana. Por un lado, los bonares cotizan a un 30% promedio, mientras que los subsoberanos de buen crédito se ubican en niveles cercanos al 12% anual. "Podríamos considerar este título como una mezcla de ponderaciones de distintos instrumentos locales. Es por ello que destacamos la buena relación riesgo/retorno que tiene el Bopreal y nuestra preferencia por el mismo versus otros bonos subsoberanos y corporativos", señalan en Delphos. Cuanto más alta la brecha y mayor sea la paridad, más conveniente será la suscripción del Bopreal respecto de la posibilidad de acudir al dólar MEP (y luego pasar a una cuenta en el exterior) o dólar CCL. "Para paridades cercanas o inferiores a 60%, siempre conviene acudir al CCL para hacerse de los dólares. Difícilmente las paridades se ubiquen muy por encima que las de los Bonares, considerando que el riesgo BCRA para una deuda en dólares ley argentina tal vez no sea muy diferente al riesgo Tesoro, y que el valor de los endulzantes no sea significativo", precisan en LCG. En términos dinámicos, si la mejor opción es comprar CCL, eso hará subir el dólar paralelo por su mayor demanda y aumentará la conveniencia de suscribir Bopreal. Por eso, el bono ayuda como barrera de contención de la suba del dólar. Respecto de las opciones de carry trade, a medida que pasa el tiempo, con tasas de inflación elevadas y un deslizamiento cambiario casi nulo en este contexto (2% mensual), la probabilidad de una nueva devaluación aumenta.