

Las acciones chinas avanzaron luego de que los inversores buscaron acciones que cayeron durante la semana pasada, aun cuando unos datos sugirieron una posible ralentización del crecimiento en la segunda economía más grande del mundo.
El referencial CSI300 de las principales acciones que cotizan en Shanghái y Shenzhen avanzó un 1,3%, a 3.694,68 puntos, mientras que el índice compuesto de Shanghái se fortaleció un 0,9% a 3.237,36 unidades.
Las ganancias fueron lideradas por los títulos de las firmas de alta tecnología, consumidores y salud que sufrieron pérdidas la semana pasada.
Los inversores no parecieron agitados por unos datos reportados que mostraron que la producción fabril de China se desaceleró más que lo esperado en julio, mientras que la inversión y las ventas minoristas también decepcionaron. (Reporte de Andrew Galbraith. Editado en español por Carlos Aliaga)
El índice Nikkei de la bolsa de Tokio cayó a un mínimo en tres meses y medio después de un fin de semana largo, debido a que la tensión entre Estados Unidos y Corea del Norte llevó a los inversores a desprenderse de los activos más riesgosos.
Un repunte del yen el viernes y las preocupaciones geopolíticas eclipsaron el reporte de unos datos que mostraron que la economía de Japón creció a un ritmo mucho más fuerte que lo esperado en el segundo trimestre.
El Nikkei cerró con un desplome de un 1,0% a 19.537,10 puntos, su nivel de cierre más bajo desde el 2 de mayo.













