Los dólares financieros siguen al alza y alcanzaron máximos. La dolarización de carteras se hace cada vez más evidente antes de las elecciones de octubre. Para hacerlo, los analistas buscan activos alternativos. Entre ellos, se destacan los Cedear y, a su vez, apuntan sobre todo a aquellos que pagan dividendos. Cuáles son los que lo hacen en octubre y que le permitirán al inversor hacerse de unos dólares extra. En medio de la volatilidad cambiaria que vive la Argentina, el proceso de dolarización de portafolios está a flor de piel. El tipo de cambio financiero MEP superó los $1494 mientras que el CCL alcanzó los $1541, operando en máximos. Dentro de los activos que se suele utilizar para llevar a cabo dicha dolarización son los Cedear, es decir, los certificados de depósitos de acciones de Wall Street que cotizan en la bolsa porteña. Adicionalmente, y aprovechando la suba del tipo de cambio, luce interesante saber qué acciones pagan dividendos este mes de modo de que el inversor pueda hacerse de unos dólares extra, gracias al cobro de los mismos. Entre las compañías que distribuyen dividendos este mes se encuentran State Street (STT), Comcast (CMCSA), Bristol Myers (BMY), Cisco (CSCO), Micron (MU), Phillip Morris (PM). Dentro de la primera quincena también se incluyen acciones como JP Morgan (JPM), Dollar General (GD), Mastercard (MA), Oracle (ORCL), Accentre (ACN), AT&T (T), General Dynamics (GD), Verizon (VZ), Abbott (ABT), Freeport McMoran (FCX), entre otros. Estas compañías pagan entre u$s 0,1 y u$s 1,5 por acción, operando con un dividend yield de entre 0,1% y 5,5%. En la segunda quincena, pagan dividendos compañías como Colgate (CL), EOG Resources (EOG), Dell (DELL), Lowe´s (LOW), CVS Health Corp )CVS), GE Healthcare (GEHC), Texas instrument (TXN), entre otros. Lo interesante para los inversores en la bolsa local es que los dividendos de los Cedear se abonan en dólares. Por ello, el inversor que apuesta al Cedear de compañías que pagan dividendos, además de ganar por la apreciación de la acción, también apuesta al cobro de dólares mediante los dividendos. La decisión de distribuir dividendos es propia de cada compañía, es decir, no es obligatorio y responde a lo que decidan los accionistas y el management de la misma. Dicha decisión surge a partir del flujo del negocio que haya tenido la compañía a lo largo del año. Incluso hay compañías que deciden tener una política propia de pago de dividendos, mientras que otras directamente no distribuyen dividendos. Cuando una compañía obtiene ganancias, las mismas pueden ser reinvertidas en el negocio de la empresa, o bien, distribuir dicho beneficio a sus socios, es decir, los accionistas. Se trata de una estrategia de cada una de las empresas en función de su negocio y flujo de caja con el que cuenten. Por otro lado, la periodicidad de pago también es una política de cada compañía, del mismo modo el dividend yield que deciden pagarles a sus socios. Paulino Seoane, Head Investment Ideas en Balanz, explicó que, por lo general, las empresas que distribuyen dividendos son aquellas con negocios maduros, ganancias estables y un historial de devolución a sus accionistas. "Estas compañías suelen ser de las industrias financiera, energética, servicios públicos, productos básicos de consumo, telecomunicaciones y bienes raíces. Las acciones que pagan dividendos tienden a ser menos volátiles que aquellas que no lo hacen. Además, un flujo de dividendos estable y confiable puede marcar la diferencia en los rendimientos de las carteras, proporcionando ingresos incluso en mercados inestables", detalló Flavio Castro, analista de Wealth Management de Criteria, explicó que el dividendo que pagan las compañías no es independiente del precio de las acciones. "El dividendo es flujo de caja generado por la compañía que decide repartirse en manos de los accionistas. Dentro de la estructura de flujo de caja libre de la empresa, el dividendo es efectivo que, de otro modo, se habría acumulado en el balance general en lugar de distribuirse entre los accionistas", comentó Castro. Además, agregó que el precio de la acción, al pagarse el dividendo, se reduce en la fecha a partir de la cual los que compran la acción no tienen derecho al cobro del dividendo. En ese sentido, Castro agregó que "las empresas que pagan un dividendo respaldado por flujo de caja libre pueden ser excelentes inversiones a largo plazo". El futuro de lo que ocurra con los Cedear no solo depende del tipo de cambio (CCL) sino también de cómo le vaya a la compañía en Nueva York. La avalancha de pago de dividendos de octubre llega en un momento en el que Wall Street opera en máximos y con altas valuaciones. El 2025 viene siendo un muy buen año para las acciones en EEUU. El S&P500 sube 13,6% en el año, mientras que el Nasdaq registra ganancias de 17,4%. Por su parte, el Dow Jones muestra subas de 9% este 2025. El actual rally del mercado hizo que las valuaciones en Wall Street alcance niveles elevados. El ratio de valuación Price Earning Forward (P/E) del S&P500 se ubica por encima de 22 veces ganancias, lo cual implica que el mismo se ubica bastante lejos de su promedio de 5 años (20 veces ganancias), así como también de su promedio de 10 años de 18,5 veces ganancias. Dicho de otra manera, las valuaciones en el mercado americano lucen elevadas, ya que a su vez, se encuentran cerca del pico máximo reciente alcanzado en 2021, tras el fin de la pandemia, cuando el S&P500 llegó a operar con un P/E de más de 23 veces ganancias. Esto implica que, con un historial en contra y con valuación altas, los analistas ven oportuno mantener cierto grado de cautela. Los analistas de Balanz indicaron que la recuperación del S&P 500 se mantiene, pero sus valuaciones y concentración siguen elevadas. Bajo este panorama, desde la compañía priorizan la diversificación hacia índices alternativos al S&P 500 en EE.UU., así como también una mayor diversificación geográfica. "Continuamos viendo atractivo en la diversificación hacia mid-caps en EE.UU., estrategias de igual ponderación dentro del S&P 500 y de altos dividendos. Además, favorecemos la diversificación hacia mercados desarrollados en un entorno de debilidad del dólar. Para perfiles más agresivos favorecemos también la diversificación hacia emergentes", dijeron. Finalmente, y sobre el potencial adicional en las acciones en Wall Street, Theo Sojo, Head de Research de Sailing Inversiones, advirtió que el principal riesgo en el contexto actual proviene de las elevadas valoraciones del mercado accionario estadounidense y de un déficit fiscal creciente que luce insostenible en el largo plazo. "El ratio P/E del S&P 500 se ubica cerca de los niveles alcanzados durante la burbuja tecnológica del año 2000, lo que indica que gran parte del optimismo (Inteligencia Artificial) ya está incorporado en los precios, dejando al mercado vulnerable ante cualquier shock negativo", alertó.