Mitt Romney pasó la mayor parte del año tratando de convencer a los precavidos republicanos de que él es suficientemente de derecha para ser su candidato a presidente, cuando antes se describía como severamente conservador.

Cómo le irá cuando se enfrente a Barack Obama dependerá en parte de su capacidad de entusiasmar a las bases del Partido Republicano, que de lo contrario podrían directamente abstenerse de votar.

Él no es mi idea de perfección, pero tenemos que elegir entre una persona que no es exactamente lo que queremos, o seguir a otra que definitivamente no es lo que buscamos, señaló Steven Wiles, estudiante de derecho de 33 años que esta semana participó de una manifestación contra el matrimonio entre homosexuales en Winston-Salem, en Carolina del Norte.

Con el apoyo de los conservadores, ese estado promulgó una enmienda constitucional que prohibe el matrimonio y uniones civiles entre personas del mismo sexo.

Romney ganó las primarias presidenciales en Carolina del Norte, Indiana y West Virginia el mismo día, por lo que sigue su constante avance hacia la nominación.

Al caerse todas las alternativas conservadoras, los activistas del Tea Party como Wiles tienen poca opción más que apoyar a Romney. No tengo mucho entusiasmo, pero creo que es el menor de los dos males, señaló Cuck Miller, marino retirado que participó de la marcha. Este largo proceso (de las primarias) lo empujó hacia la derecha, no sólo en temas económicos sino también en cuestiones sociales y espero que se quede ahí si es electo presidente.

El apoyo del Tea Party será crucial para Romney en estados como Carolina del Norte, que tradicionalmente es republicano pero que votó a Obama por un leve margen.

Las reservas sobre las credenciales conservadoras de Romeney hacen que los activistas estén poniendo más énfasis en las carreras por las bancas en la Cámara de Diputados y el Senado. Allí es donde se librará la verdadera batalla, aseguró Brendan Steinhauser, director de las campañas federales y estaduales en FreedomWork, organización que apoya el movimiento Tea Party.

Indiana mantiene el avance, y luego llegan Utah, Nebraska y Arizona, señaló enumerando las primarias republicanas donde candidatos del Tea Party esperan obtener la nominación.

Los activistas del Tea Party obtuvieron una gran victoria esta semana, superando a Dick Lugar, el senador que lleva seis mandatos. Quieren que su banca sea ocupada por el más conservador Richard Mourdock.