Los ataques crecientes de Donald Trump contra la Reserva Federal sacudieron a los mercados financieros, mientras los inversores muestran una preocupación cada vez mayor por los riesgos a la independencia del banco central y su capacidad a largo plazo para combatir la inflación. El dólar estadounidense, considerado un termómetro de la salud de la mayor economía del mundo, cayó un 1,2% frente a una cesta de monedas el miércoles, inmediatamente después de que se informara que el presidente había preguntado a un grupo de legisladores si debía destituir al presidente de la Fed, Jay Powell. Posteriormente, la divisa recuperó parte de las pérdidas. Más tarde, Trump aseguró que era "muy poco probable" que destituyera de forma inminente al titular de la Fed, lo que estabilizó el dólar, pero el episodio puso de relieve cómo las críticas crecientes del presidente hacia Powell están afectando a los mercados. "Incluso después de la corrección, hay una mayor probabilidad de que Trump despida a Powell... se puede ver en los mercados", señaló Bill Campbell, gestor de carteras en la firma DoubleLine, especializada en bonos. Michael Feroli, economista jefe de JPMorgan en EE.UU., añadió en una nota a clientes que "la crisis inmediata puede haber pasado, aunque dudamos que este episodio haya terminado por completo". Goldman Sachs observó que la reacción del mercado, que incluyó también una caída temporal en las acciones, fue "característica de una huida del riesgo en activos estadounidenses, más que de un simple impacto de política monetaria moderada". El banco de Wall Street añadió: "El ida y vuelta sirve como un recordatorio importante de la agenda política volátil e incierta en Estados Unidos, que va más allá de las políticas comerciales y arancelarias". Trump y sus aliados atacan a Powell en dos frentes. El presidente, que llamó a Powell "cabeza hueca", pidió a la Fed que baje las tasas de interés hasta en 3 puntos porcentuales desde su nivel actual de entre 4,25% y 4,5%. Sin embargo, la Fed se abstuvo de reducirlas, en parte por temor a que los aranceles de Trump aviven la inflación. Funcionarios de alto nivel de la administración también acusan a Powell de haber gestionado mal una renovación de 2.500 millones de dólares en la sede central de la Fed en Washington. Russell Vought, director de la Oficina de Administración y Presupuesto, calificó el proyecto de "gravemente mal gestionado" y "ostentoso". Powell calificó estas acusaciones de "inexactas" y aseguró que muchas de las características incluidas en los planes originales -como ascensores especiales, colmenas y terrazas en la azotea- ya habían sido eliminadas. "Socavar la independencia del banco central, o colocar a alguien que solo actúe por órdenes políticas respecto a la tasa de interés, me recuerda a Turquía", dijo Desmond Lachman, del think tank American Enterprise Institute, en referencia a la destitución recurrente de presidentes del banco central por parte del presidente turco Recep Tayyip Erdoan ante su resistencia a bajar las tasas de interés. En general, los inversores esperan que Powell permanezca como presidente hasta que termine su mandato en mayo próximo, pero el asedio de Trump a la Fed generó especulaciones sobre si nominará a un sucesor más afín a su preferencia por tasas bajas. Los indicadores de inflación esperada en los mercados -conocidos como tasas breakeven- alcanzaron máximos de varios meses el miércoles, cuando la reunión de Trump con legisladores avivó la preocupación por la independencia del banco central. Este movimiento fue especialmente marcado en las tasas breakeven a más largo plazo, lo que refleja el temor creciente de que una Fed más flexible tenga dificultades para contener la inflación en los próximos años. El breakeven a diez años en Estados Unidos superó el 2,4% el miércoles, su mayor nivel desde febrero. En abril estaba por debajo del 2,1%. "Parte del aumento de los breakeven a largo plazo tiene que ver con la percepción de que podría haber una Fed más moderada en el futuro", explicó Durham Abric, responsable de inflación estadounidense en Citadel Securities. También influye la presión inflacionaria provocada por los aranceles. Mark Dowding, director de inversiones en renta fija de RBC BlueBay Asset Management, indicó que las dudas sobre la independencia de la Fed están impulsando al alza los breakeven. Si Powell es destituido, se asume que un nuevo presidente de la Fed será nombrado para cumplir la voluntad de Trump recortando las tasas de manera agresiva", añadió. El rendimiento de los bonos del Tesoro a 30 años, especialmente sensibles a las perspectivas de inflación, superó el 5% esta semana, y el diferencial frente a los bonos a corto plazo se acerca a su mayor nivel desde principios de 2022. Mike Riddell, gestor de fondos en Fidelity International, sostuvo que la mayor rentabilidad exigida en la deuda a largo plazo "es la reacción esperable si el mercado teme por la independencia del banco central".