

Iberdrola está pasando por uno de sus momentos más dulces. La presentación de resultados de los primeros nueve meses del año es otra prueba más de su excelente actualidad.
La eléctrica dispara un 50% su beneficio neto hasta los 5471 millones de euros, impulsado por las plusvalías millonarias registradas con la venta de activos en México, de acuerdo al balance presentado esta mañana a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), en las que la compañía atribuye también el resultado a niveles máximos a las inversiones récord que ascendieron hasta los 8600 millones a septiembre, cifra que explica un incremento del 12% en relación al mismo periodo de 2023.
En caso de contabilizarse los últimos doce meses, las inversiones alcanzaron los 12.300 millones de euros, lo que supone un incremento del 13%, siempre en relación al ejercicio anterior.
Retornando a México, si se excluyen el impacto en las cuentas la venta de activos en el mercado azteca, que sumó 1165,2 millones de euros, el beneficio neto de la empresa que preside Ignacio Galán se situaría en 4305,5 millones de euros, aumentando un 18,4% respecto a los primeros nueve meses de 2023 y, en términos recurrentes, sin contar la recuperación del déficit de tarifa de Reino Unido y la provisión por impuestos en el país de América del Norte en 2023, la subida llega a un 22%.
En cuanto al beneficio bruto de explotación (Ebitda), llegó a los 13.269 millones de euros, lo que supone un 23% más. En tanto, el Ebitda recurrente creció un 11%, hasta los 11.551 millones de euros. Las causas hay que buscarlas en Estados Unidos y Reino Unido que impulsaron el resultado, con incrementos del 25% y el 15% en el Ebitda, respectivamente.

Asimismo, conviene destacar que, en la presentación de resultados del tercer trimestre, Iberdrola fijó la previsión de beneficio para el conjunto del ejercicio en los 5500 millones de euros, "lo que supone un incremento del 14% respecto al año anterior (excluyendo cualquier plusvalía por rotaciones de activos), impulsado por los nuevos marcos tarifarios de las redes, el incremento de la capacidad instalada y al aumento de los contratos a largo plazo".
Lo cierto es que esta evolución positiva se debió al aumento de las inversiones, el buen comportamiento de la producción renovable y los resultados provenientes de la rotación de activos, explica la compañía.
En otro orden, la principal eléctrica española y una de las más importantes de Europa, pagó 1924 millones de euros en impuestos en el periodo, un 7% menos que en 2023. Con todo, tuvo que desembolsar 100 millones este año por el impuesto energético que grava los ingresos no regulados en el país de las grandes compañías; esto es, la mitad que, en 2023, debido al descenso de los precios de la energía.
Iberdrola además aumentó su dividendo a cuenta un 14%, hasta los 0,23 euros por acción, tras alcanzar este año ya el suelo de dividendo para 2025, fijado en 0,55 euros. Vale recordar que este año se distribuyeron 0,558 euros por título.
Desglose de las inversiones
La compañía destinó unos 4400 millones de euros a redes -lo que supone un incremento del 25% - en los nueve primeros meses. En la actualidad, la base de activos de redes eléctricas alcanza ya los 47.600 millones (incluyendo la británica ENW), suponiendo Estados Unidos y el Reino Unido ya el 60% del total.
Además, Iberdrola invirtió 4000 millones de euros en generación y clientes, lo que le permitió instalar más de 2.300 MW renovables en el periodo.
"Gracias a las inversiones y a la nueva generación renovable, la producción de la compañía marcó un récord histórico al alcanzar los 63.300 GWh en los nueve primeros meses, lo que supone un incremento del 7,4%", y añade que "también fue histórica la electricidad distribuida por la compañía, con 177.943 GWh, un 2,5% superior a la del mismo periodo del año anterior".
Lo cierto es que, con estas inversiones, el grupo incrementó su presencia en países con rating A en los negocios regulados, hasta obtener el 82% del beneficio operativo recurrente de estas regiones.
Gran solidez financiera
La compañía incrementó su flujo de caja un 69%, hasta los 13.821 millones de euros. Así el FFO/deuda neta mejoró en 210 puntos básicos, hasta el 25,3%.
Además, posee una liquidez de 22.100 millones de euros, lo que le permitiría cubrir 20 meses de necesidades financieras sin recurrir al mercado. De hecho, Iberdrola consiguió disminuir el coste de su deuda en 14 puntos básicos, hasta situarse en el 4,84%.
En el documento presentado a la CNMV, Ignacio Galán resalta la positiva evolución del plan estratégico, en un momento en el que la compañía ronda los 90.000 millones de euros de capitalización y cuenta con buenas perspectivas de los bancos de inversión.
Es más, en la actualidad, Iberdrola tiene el 90% de la cadena de suministro asegurada para redes y renovables hasta 2026. De hecho, en eólica marina la compañía ya tiene el 100% de los contratos firmados y en redes, el 95% para 2026, al tiempo que está asegurando las compras para los años 2027 y siguientes.
Así las cosas, en la presentación de resultados se destaca que la eléctrica está acelerando su plan estratégico y aprovechando las nuevas oportunidades de electrificación. Por ello, afirma, tiene previsto aumentar sus previsiones de inversión en renovables y redes en un entorno de mayor apoyo regulatorio.
La eléctrica aumentó sus inversiones, principalmente en Estados Unidos y Reino Unido. Además, cerró la compra de la británica ENW y obtuvo la aprobación de los accionistas de Avangrid para su fusión.
A esto se suma que Iberdrola multiplicará por tres su capacidad de eólica marina hasta los 6500 MW en 2030, ya que la compañía logró dos proyectos nuevos offshore en Reino Unido -East Anglia 2 y 3- de 1000 MW y uno en EE.UU. -New England- de 800 MW.
Iberdrola cuenta también con una importante cartera de clientes a largo plazo, como el contrato que firmó por 5 millones de MWh en 2024 y suministra más de 10 TWh a compañías tecnológicas.
Párrafo aparte, merece su papel facilitador en el desarrollo de los centros de datos, ya que cuenta con 615 MW con conexión asegurada en Madrid y Aragón y una cartera potencial de 5 GW.
Como consecuencia de ello, Iberdrola desarrolló un modelo de alianzas, en las que tendrá una participación minoritaria, aportando terreno, activos renovables, conexión a la red y contratos a largo plazo con energía limpia 24x7. La compañía celebrará su próximo Capital Markets Day en otoño de 2025.












