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Iberdrola comienza la semana de resultados correspondientes a los nueve primeros meses de 2025 del Ibex 35, y lo hace con un beneficio neto reportado de 5307 millones de euros hasta septiembre de 2025, cifra que explica un incremento del 17% respecto al mismo lapso de tiempo del año anterior.
Con todo, excluyendo plusvalías el beneficio neto es un 3% inferior a los 5.471 millones conseguidos en 2024. La acción sube un 2,32% pasado el mediodía.
La compañía atribuye este crecimiento en las ganancias - sin tener en cuenta atípicos como desinversiones y deducciones - a unas inversiones récord de 9.000 millones de euros en los últimos 9 meses, lo que supone un incremento del 4%, respecto al mismo periodo del año anterior.
Asimismo, de la mano de su negocio internacional, y focalizado principalmente en redes y con una importante fortaleza financiera, Iberdrola prevé un aumento de dos dígitos respecto al beneficio neto ajustado de 2024.
En concreto, Iberdrola estima un beneficio para el conjunto del ejercicio de 6600 millones de euros. El resultado neto superará los 6200 millones sin contar con 389 millones ya cobrados por costes pasados de redes en los Estados Unidos.
Por otra parte, y gracias a estos resultados, la eléctrica que preside IgnacioSánchez Galán cuenta ya con más de 160.000 millones de euros de activos y una capitalización que ronda los 115.000 millones, lo que la sitúa como la primera utility de Europa y una de las dos más grandes del mundo por valor bursátil.
Las redes eléctricas como motor
De acuerdo a la compañía, el incremento del beneficio vino impulsado principalmente por el aumento de las inversiones, el buen comportamiento del negocio de redes y la mejora de los nuevos marcos regulatorios.
Así, de los 9000 millones de euros de inversión, más del 60% corresponden a los negocios en Reino Unido y Estados Unidos.
Iberdrola destinó unos 4904 millones de euros a inversiones en redes (55%). Esto hizo que la base de activos de redes eléctricas alcance los 49.300 millones, lo que supone un incremento del 12% respecto al mismo periodo de 2024.
En el área de generación y clientes, Iberdrola invirtió 3442 millones de euros, lo que le permitió contar con más de 2000 MW renovables de capacidad instalada en los últimos 12 meses. La empresa destinó el 60% de esta inversión a Reino Unido y Estados Unidos.
También destaca que impulsado por este esfuerzo inversor, el beneficio bruto de explotación (Ebitda) alcanzó los 12.438 millones de euros. De esta forma, el Ebitda ajustado crece un 4,4%. El 83% del Ebitda procede de países con alta calificación crediticia, con Reino Unido y Estados Unidos aumentando su contribución 12 puntos básicos hasta el 43%.
Por negocios, el resultado operativo de redes aumentó un 26% por el incremento de las inversiones y los nuevos marcos regulatorios. El Ebtida del área de producción renovable y clientes cae un 11%, tras las desinversiones y el aumento de costes de servicios complementarios en la Península Ibérica.
Mayor solidez financiera
Iberdrola redujo su deuda neta en 3200 millones de euros los nueve primeros meses del año, hasta situarse alrededor de los 48.500 millones de euros, gracias a su política de rotación de activos y alianzas.
De hecho, la empresa afirma que continúa con su estrategia de alianzas y desinversiones, a la vez que firmó acuerdos por más de 8000 millones de euros durante los primeros nueve meses de 2025, con un impacto positivo en la deuda neta de unos 4500 millones.
En tanto, el flujo de caja crece un 10% a cierre de septiembre, hasta casi rebasar los 9752 millones de euros y el flujo de caja operativo/deuda neta se sitúa en el 26,2%, tras subir en 330 puntos básicos.
Además, posee una liquidez de 23.000 millones de euros, lo que le permitiría cubrir 25 meses de necesidades financieras sin recurrir al mercado. Así, la multinacional española consiguió disminuir el coste de su deuda un 12%, hasta situarse en el 4,72%.
