

El control del tiempo de trabajo en las empresas entra en una nueva etapa con la implementación obligatoria de un sistema digital de registrohorario. Esta reforma laboral busca terminar con prácticas opacas que perjudicaban principalmente a los trabajadores, como fichajes manipulables, registros manuales sin control o directamente la ausencia total de seguimiento.
El nuevo mecanismo, más estricto y digital, exigirá que cada minuto trabajado quede debidamente registrado y, si corresponde, remunerado.
El objetivo del Gobierno es claro: proteger al empleado y garantizar la transparencia en la jornada laboral. En este contexto, el registro digital no será una opción, sino una obligación.
Las empresas deberán adaptarse a este sistema que permitirá verificar la cantidad real de horas trabajadas, incluso en tiempo real por parte de la Inspección de Trabajo. Para muchas compañías, esto implica un esfuerzo adicional; para los trabajadores, representa un avance en sus derechos.
¿Qué cambia con el nuevo sistema de control horario?
La principal novedad es que el fichaje manual desaparece. El nuevosistema será digital, personalizado e inviolable. Cada trabajador deberá registrar su entrada y salida mediante un método que asegure su identidad, eliminando así cualquier posibilidad de manipulación.

Este nuevo control deberá estar disponible para consultas remotas de la Inspección de Trabajo, y no dependerá de la voluntad de la empresa.
Además, se considerarán como tiempo efectivo todos los minutos comprendidos entre el inicio y el final de la jornada. Las horasextra deberán quedar reflejadas y remuneradas. Esto no solo busca justicia salarial, sino también reforzar el cumplimiento de la jornada legal, especialmente frente a los abusos en sectores donde las extensiones no remuneradas eran moneda corriente.
¿Qué deben entregar las empresas y qué pasa si no lo hacen?
Una de las obligaciones más destacadas es la entrega de un recibo mensual con el detalle de todas las horas trabajadas. Este comprobante se deberá entregar junto con la nómina e incluirá tanto horas ordinarias como extraordinarias. La medida ha sido celebrada por los sindicatos, que históricamente denunciaron la invisibilidad de muchas horas trabajadas fuera de convenio.

Si una empresa no puede justificar el horario de un trabajador, la ley presumirá que su contrato es a jornada completa. Además, se contemplan sanciones económicas por cada empleado afectado.
Esta presión busca que Recursos Humanos tomen cartas en el asunto y que las compañías dejen de ver el fichaje como un simple trámite interno para transformarlo en un deber legal ineludible.












