

Hace un año, José Elías viajó más allá del Círculo Polar Ártico para pescar bacalao junto al equipo de La Sirena. Ese recorrido le dio acceso directo a todo el proceso: la captura del pescado a 2 grados, las temperaturas bajo cero, la presión física y mental, y la forma en que el producto termina procesado y distribuido.
El pasado 17 de noviembre, el empresario ha publicado en X una radiografía de su cadena de congelados, La Sirena: el coste de abrir una franquicia, el salario que paga, las bajas laborales y el beneficio final que, aunque pueda parecer pequeño, sostiene toda la estructura.

“Invierto 300.000 euros. Contrato a cuatro personas. Sé que una de cada diez tiendas acabará cerrando. Y que, de media, el 7% de los empleados estará de baja (y seguiré pagando sus sueldos). Cuando lo explicas así, muchos entienden el riesgo”, afirma el empresario.
José Elías, empresario: “Montar un supermercado La Sirena cuesta 300.000 euros. Y solo me deja 30.000 euros de beneficio”
Tener un negocio de tal magnitud es multiplicar el beneficio. “300.000 euros x 300 supermercados = 9 millones de euros. Entonces te sueltan: ¿Para qué necesitas ganar tanto dinero? Pues para poder asumir 300 inversiones de 300.000 euros, gestionar 1200 personas y resolver 300 problemas distintos cada día. Detrás de cada euro de beneficio hay riesgo, estrés y decisiones difíciles“.
“Cuando alguien dice que los empresarios ganamos demasiado, yo pienso lo mismo siempre: no tienen ni idea de lo que cuesta mantener todo esto en pie”, señala.
Detrás de esas cifras hay personas: un total de 1200 familias, según ha destacado Elías, y 300 localidades con un punto de venta de congelados que ofrece carne, pescado, verduras, helados, platos preparados y precocinados.
Cabe destacar que La Sirena no es su única actividad empresarial; es una de las que genera beneficios y le permite ampliar su presencia en otros sectores y aumentar sus inversiones, como explicó recientemente al detallar cuánto dinero mantiene en el banco y cuál es su destino.












