

Las plantas de nuestro jardín no son ajenas a los estragos del clima, especialmente cuando las altas o muy bajas temperaturas y una posible ausencia por vacaciones se combinan, dejándonos con un paisaje de hojas amarillas y tallos caídos a nuestro regreso. Sin embargo, no todo está perdido para esas plantas marchitas.
Según expertos, es posible devolverles la vida con algunos ingredientes simples que podemos encontrar en casa. Antes de proceder, es crucial realizar una poda adecuada para preparar a la planta para su revitalización.

Jardinería: ¿con qué dos ingredientes se puede revivir plantas marchitas?
Antes de aplicar cualquier tratamiento, es fundamental eliminar las partes de la planta que ya no tienen vida. Las hojas secas y las ramas quebradizas no solo afean el aspecto de tus plantas, también consumen energía vital que podría emplearse en fomentar nuevas y saludables hojas. Por ello, el primer paso es realizar una poda cuidadosa, retirando todo lo que parece muerto o dañado.
Una vez que tu planta está lista para recibir tratamiento, es hora de hablar sobre los dos ingredientes que pueden hacer maravillas: la canela y el agua. La canela, conocida por sus propiedades antifúngicas, ayuda a fortalecer las plantas en su momento más vulnerable, evitando que los hongos aprovechen su debilidad.
El método de aplicación es simple. Solo necesitas disolver una cucharada de canela en polvo en un litro de agua tibia. Una vez que la canela esté bien mezclada con el agua, transfiérela a un rociador. Deja que la solución repose unos segundos antes de usarla para que la canela libere sus propiedades en el agua.
Luego, procede a rociar las plantas con esta mezcla cada 15 días. Observarás cómo, gradualmente, tus plantas recuperan su color y vitalidad, y también desarrollan una mayor resistencia a las condiciones adversas.

Consejos adicionales para el cuidado de plantas
Mantener tus plantas saludables requiere algo más que solo un tratamiento ocasional con canela y agua. Aquí te dejamos algunos consejos prácticos que complementarán este remedio y ayudarán a asegurar que tu jardín prospere:
- Riego adecuado: asegúrate de regar tus plantas regularmente, especialmente en las semanas más calurosas. El riego temprano en la mañana o al atardecer minimiza la evaporación y permite que el agua se absorba eficazmente.
- Ubicación estratégica: si es posible, mueve las plantas más sensibles a la sombra durante las horas de mayor sol para evitar quemaduras en las hojas.
- Vigilancia de plagas: revisa tus plantas regularmente para combatir cualquier infestación tempranamente, preferiblemente con métodos naturales.












