Chile y Perú, en pie de guerra por un certificado que le dará millones de dólares a uno de los dos países
La histórica controversia sobre el origen de una bebida enfrenta nuevamente a ambos países.
La rivalidad entre Chile y Perú por la denominación de origen del pisco ha resurgido con fuerza. Ambas naciones reivindican la autenticidad de esta bebida espirituosa, lo que ha derivado en disputas comerciales y culturales que podrían implicar pérdidas millonarias para quien no obtenga el reconocimiento internacional.
Recientemente, las autoridades peruanas han presentado documentación histórica ante la UNESCO para respaldar su posición sobre el origen del pisco. Esta acción ha llevado al ministro de Agricultura chileno, Esteban Valenzuela, a anunciar que Chile prepara una defensa sólida para contrarrestar las afirmaciones peruanas. Valenzuela enfatizó que el pisco es parte integral de la cultura chilena y que el país no cederá en esta disputa.
Impacto económico de la denominación de origen
La denominación de origen del pisco no solo es una cuestión de orgullo nacional; también tiene implicaciones económicas significativas. El reconocimiento oficial permite a los productores acceder a mercados internacionales con exclusividad, lo que se traduce en ingresos sustanciales.
En Perú, la industria del pisco ha experimentado un crecimiento notable, con exportaciones que superan los 10 millones de dólares anuales. Chile, por su parte, también ha visto incrementos en sus exportaciones de pisco, consolidándose en mercados como Estados Unidos y Europa.
La obtención de la denominación de origen exclusiva podría otorgar a uno de los países una ventaja competitiva en el mercado global de bebidas alcohólicas, afectando directamente a los productores y exportadores del otro país. Además, influiría en aspectos turísticos y culturales, ya que el pisco es un atractivo emblemático en las rutas turísticas de ambas naciones.
Antecedentes para la disputa entre Chile y Perú
La controversia por el pisco entre Chile y Perú no es nueva. Ambos países han librado batallas legales en diversos mercados internacionales para obtener el reconocimiento de la denominación de origen. En 2013, por ejemplo, Perú logró que la Unión Europea reconociera al pisco como una bebida exclusivamente peruana, lo que limitó la comercialización del pisco chileno bajo esa denominación en territorio europeo.
Chile, en respuesta, ha fortalecido sus estrategias de marketing y ha buscado nuevos mercados para su pisco, destacando las particularidades de su producción y las regiones específicas donde se elabora, como las zonas de Atacama y Coquimbo. La reciente iniciativa peruana ante la UNESCO ha reavivado las tensiones, llevando a ambos países a preparar nuevas defensas de sus respectivas posiciones.
Perspectivas futuras y posibles soluciones
La disputa por la denominación de origen del pisco entre Chile y Perú parece lejos de resolverse. Ambos países continúan presentando evidencias históricas y culturales para respaldar sus reivindicaciones. Una posible solución podría ser el reconocimiento mutuo y la coexistencia de ambas denominaciones, permitiendo que cada país destaque las particularidades de su pisco en los mercados internacionales.
Mientras tanto, los productores y exportadores de pisco en Chile y Perú permanecen atentos al desarrollo de esta controversia, conscientes de que el resultado podría tener un impacto significativo en sus economías y en la promoción de su patrimonio cultural.