El prestigioso periódico británico The Economist se preguntó hoy si en la Argentina llegó el fin de la “pax cambiaria” entre el peso y el dólar. Y señala desde el vamos que la palabra con la que los economistas argentinos más frecuentemente resumen la estrategia del Gobierno es “parchando”.

El artículo de la sección The Americas Views resume los movimientos del mercado cambiario en los últimos meses: la devaluación del 20% de enero, la estrategia posterior del Banco Central de subir tasas y secar la plaza de pesos y la apertura parcial del cepo cambiario para tratar de achicar la brecha entre el dólar oficial y el paralelo.

También menciona como, desde febrero, el dólar se estabilizó en $ 8 generando una “pax cambiaria” y que la minidevaluación del 0,5% de la semana pasada hizo al peso “8 veces más volátil que en abril”. Y apunta como los precios –cita al economista Miguel Kiguel, de Econviews, que proyecta una inflación anual del 38%- y la debilidad de las reservas presionan sobre la moneda argentina.

A la combinación de esas tres cosas –reservas, inflación y desanclaje del dólar oficial- atribuye el “temor” que habría dado el nuevo impulso al blue y que, “de continuar, pondrá más presión aún sobre las reservas mientras los productores agropecuarios aguardan para vender sus cosechas a la espera de una devaluación”.

Lo que el Gobierno intentará hacer en los próximos meses no está claro”, sostiene The Economist y menciona la posibilidad de que siga devaluando lentamente, a un ritmo del 2% mensual, o trate de mantener al peso fuerte como ancla antiinflacionaria, aunque considera inevitable que en algún momento haya una suba más drástica del dólar.

Y concluye citando al economista Tomás Bulat: “Antes o después, el Gobierno va a tener que devaluar otra vez. Probablemente devalúen de a poco hasta diciembre o enero, cuando el déficit fiscal y la emisión monetaria crecen más, y entonces veremos otra devaluación como la de este año”.