Las empresas de colectivos, la Unión Tranviaria Automotor (UTA) y el Gobierno tendrán una reunión esta tarde para intentar destrabar los acuerdos salariales y el envío de subsidios, pero ¿qué puede pasar si las empresas deciden retener el servicio ante el congelamiento de los pasajes?
Durante 2023, las distintas cámaras que nuclean a las empresas de colectivos decidieron no prestar servicio por la noche y reducir la frecuencia durante el día al 50% ante la falta de actualización de los subsidios del Gobierno.
Ahora, ante una postura similar por parte de los empresarios, la nueva gestión de la Casa Rosada emitió una resolución que penalizará a las líneas de colectivo si realizan el llamado lock out patronal y dejan de prestar servicio por la falta de pago o por la no actualización del boleto.
La decisión del ministro de Economía, Luís Caputo, quien se hizo cargo de la cartera de Transporte, es "descontarles el día" a las empresas, al igual que se hace a los trabajadores cuando se realiza un paro y no se les abona la jornada con el salario.
"Se deducirá a partir del primer pago o asignación a efectuarse en forma posterior a que se produzca la novedad, por cada día de suspensión o interrupción de los servicios, el equivalente a un treintavos (1/30) de los montos de las compensaciones que corresponda percibir a cada destinataria", detallaron en la Resolución 212/2024 del Boletín Oficial.
Sobre este punto, agregaron que "se considerará que existe suspensión o interrupción cuando los servicios públicos de transporte automotor urbano y suburbanos e interurbanos asimilables a los mismos, sean prestados por debajo de la frecuencia mínima establecida", por lo que si las unidades circulan al 50% también serán penalizadas.
Paro de colectivos: la jugada del Gobierno antes de la reunión
Esta decisión se toma horas antes de la reunión en la que los gremios le exigirán un pago en los sueldos de abril de $ 250.000 más a las empresas, las cuales afirman que no pueden pagar si no se les aumenta el boleto o las partidas de subsidios.
Este conflicto ya tuvo un capítulo anterior el jueves 11 de abril, cuando por esta suma que deberían haber pagado sobre el salario de marzo, los gremios realizaron un paro sorpresivo y durante 24 horas no circularon unidades en el AMBA. Solo estuvieron en la calle las pertenecientes a la empresa DOTA.
Además, en la resolución que difundió el Gobierno, insta a las empresas a cumplir con el acuerdo paritario que se fijó en las negociaciones con la Secretaría de Trabajo.
"Dar cumplimiento a los términos, condiciones y beneficios derivados de los Convenios Colectivos de Trabajo pertenecientes a la actividad laboral del sector del autotransporte de pasajeros de carácter urbano, suburbano e interurbano, con relación a la escala salarial, y a los aportes y contribuciones a la obra social", puntualizaron en el texto.
De no cumplir con esta normativa, no accederán ni mantendrán "el beneficio del precio diferencial del gasoil", por lo que también se dispararán los costos de servicio que tienen las compañías que operan transporte interurbano de pasajeros.
De esta manera, desde el Poder Ejecutivo presionan a las empresas para lograr un acuerdo en la reunión de este miércoles en la que se definirá qué sucederá con el transporte de colectivos en las próximas semanas: si hay paro de los gremios, lock out patronal o se logra un acuerdo.