La cumbre G20 arrastra los mismos desacuerdos que dejó la cita en Hamburgo 2017. A dos semanas del cónclave de líderes que se realizará en Buenos Aires, el Sherpa Pedro Villagra Delgado se mostró optimista con respecto al cierre del documento final, pero dejó en claro frente a la prensa que la lucha contra el cambio climático y el libre comercio son los dos temas que entorpecerán las negociaciones y requerirán "sudor" a la hora de generar consensos.
"El cuerpo de cosas donde creemos que va a ser relativamente fácil llegar a acuerdos es grande. Más de un 80 o 90 % en cuanto a número", aclaró Villagra Delgado, el representante-negociador de alto nivel del país que preside en 2018 el organismo, al encabezar la presentación de la agenda preliminar ante la prensa, en el Centro Cultural Kirchner (CCK).
No obstante, al igual que ocurrió en Alemania 2017, la primera cumbre a la que asistió Donald Trump como presidente de los Estados Unidos, los dos temas que seguirán siendo a priori los principales escollos del debate son el libre comercio, con el conflicto entre EEUU y China por el exceso de producción de acero y los aranceles, y la lucha contra el cambio climático, que Trump dejó en claro varias veces su desinterés.
"Ahí tenemos dificultades más grandes. Son los temas que van a requerir sudor de sherpa", dijo Villagra Delgado, acompañado por Hernán Lombardi, el coordinador de la Unidad Técnica G20, y Laura Jaitman, Deputy del Canal de Finanzas.
Los puntos que completan la lista de negociaciones "conflictivas" serán el acero, la oleada migratoria, los refugiados y el control de empresas estatales
Por otro lado, el experimentado diplomático aseguró que si bien "cada país buscará debatir en base a intereses de sus votantes", desde la Argentina buscarán instalar como prioridad la infraestructura para el desarrollo.
A su vez, las autoridades del organismo apuntarán a un comunicado final con la firmas de todos los participantes que sea "corto, de dos a tres páginas y escrito en un lenguaje que todos puedan entender".