

El "extremadamente peligroso" huracán Matthew ganó tanta intensidad al subir sus vientos máximos a 220 kilómetros por hora, que casi todas las compañías aéreas con frecuencias al estado de La Florida decidieron cancelar sus vuelos. En el caso de Argentina, al menos seis servicios que tenían previsto partir ayer desde el Aeropuerto Internacional de Ezeiza hacia Miami fueron demorados o cancelados por los efectos del huracán. De este modo, dejará de ser, por lo menos por unos días, la ciudad preferida por los argentinos para "ir de shopping", que con su presencia y su ánimo de compras se advierten en un rango muy abierto en esa localidad. De hecho, la demanda es tan alta que los vuelos se llenan tanto en épocas de temporada, de vacaciones de invierno o de verano, como en el resto del año. Esto se observa en la capacidad de ocupación de los aviones que parten de Ezeiza, impulsado por una especie de deja vú del boom de compras a Miami de la década del 90. Pero ayer, el sitio web de Aeropuertos Argentina 2000, informaba sobre varios vuelos de American Airlines; TAM; Aerolíneas Argentinas; Latam y otras empresas que fueron cancelados o sufrieron demoras. La empresa a cargo de la concesión de la terminal aérea sugiere a los pasajeros que consulten con las compañías teniendo en cuenta que Matthew golpeaba con intensidad la costa de Florida con fuertes vientos y lluvias que hicieron que el aeropuerto de Fort Lauderdale dejara de operar, lo mismo que el de Orlando.
De hecho, el servicio de rastreo de vuelos FlightAware.com reportó que 1500 vuelos dentro de Estados Unidos fueron cancelados. American Airlines, que tiene un importante centro de operaciones en Miami, fue la más afectada, seguida por Southwest Airlines y JetBlue. Las aerolíneas toman esta determinación de cancelar vuelos antes de que lleguen las tormentas para evitar que los pasajeros se queden varados en los aeropuertos y para mantener a sus aviones en posición de recuperarse después de que pase el mal clima. En la terminal de Fort Lauderdale, el último vuelo en partir ayer fue un jet de Southwest rumbo a Baltimore, que salió justo un poco antes de que venciera el límite establecido a las 10:30 de la mañana para despegue. En tanto, las autoridades de la terminal de Orlando tuitearon que esperaban cerrar sus operaciones hasta el sábado. También los grandes parques de diversiones Walt Disney World, Universal Studios y SeaWorld cerrarán estos días.
La crisis que desató este huracán en Estados Unidos es de tan dimensión que el propio presidente, Barack Obama, anunció un plan de ayuda federal a Florida, teniendo en cuenta que Matthew ya dejó más de 100 muertos y 340.000 evacuados en el Caribe. Al decretar el estado de emergencia federal, el Jefe de Estado permite desbloquear rápidamente recursos federales de asistencia y que las agencias de seguridad interior y de gestión de situaciones de emergencia coordinen las labores de rescate. Matthew es un huracán de categoría 4 en la escala de intensidad Saffir-Simpson, de un máximo de 5, y se espera un "fortalecimiento adicional" de sus vientos, aunque "debería permanecer como un ciclón de categoría 4 mientras se aproxima a Florida", advirtieron los meteorólogos. El huracán, que ya ha pasado por Haití y Cuba, países donde se han retirado los avisos y alertas por el paso de este ciclón, está causando lluvias torrenciales, fuertes vientos e inundaciones en las zonas donde tocó tierra, además de peligrosos deslizamientos.
El gobernador de Florida, Rick Scott, advirtió ayer en rueda de prensa de que "millones de ciudadanos se quedarán sin luz eléctrica" tras el embate del temible huracán. Alertó además que un impacto directo de Matthew en Florida podría causar una destrucción masiva "como no se ha visto en el estado desde el paso del huracán Andrew en 1992". En esta temporada de huracanes en el Atlántico se han formado 14 tormentas tropicales, de las que cinco se han convertido en huracanes (Alex, Earl, Gastón, Hermine y Matthew), que han causado al menos 66 muertes, la mayoría de ellas en México por el paso de Earl.










