

En esta misma columna, ayer celebramos las primeras señales de un debate maduro sobre el valor del dólar, el final del cepo cambiario y su eventual impacto en la inflación. A 12 días del ballottage que definirá quién es el próximo presidente de la Argentina, es un buen augurio que se pueda discutir sobre la economía del país que viene con un poco más de racionalidad y con algo menos de dramatismo.
Por eso, es bienvenida la participación en las páginas de El Cronista del presidente del Banco Central de la República Argentina, Alejandro Vanoli. El funcionario escribió una columna en la que argumenta porqué, a su juicio, "Una gran devaluación tendría fuerte impacto negativo en la producción y el empleo" (ver página 7). Pero eso no es todo. En sendos reportajes, exponen sus puntos de vista dos economistas de visiones contrapuestas como Roque Fernández (el último ministro de Economía de Carlos Menem) y Eduardo Curia (viceministro en la primera etapa menemista). En nuestras páginas de Opinión, el economista jefe de FIEL, Juan Luis Bour, explica sus puntos de vista sobre la "Dinámica de la inflación". Y el periodista Ernesto Tenembaum señala los peligros que, en el tramo final de la campaña, puede tener una discusión como la que abrieron Mauricio Macri y su referente económico, Alfonso Prat Gay.
La economía argentina está en terapia intensiva. La recesión lleva cuatro años; la inflación sigue siendo altísima y el déficit fiscal es cada vez más preponderante en el PBI nacional. Por eso, le damos cabida en este diario a todos aquellos que quieran contribuir aportando sus iniciativas. Confrontar ideas siempre será el camino más rápido para encontrar las soluciones.













