Salud

Así funciona el popular truco del hielo para perder peso

Este "truco" para adelgazar es un concepto popular que gira en torno a la idea de que el cuerpo quema calorías para calentar el hielo que entra en contacto con tu cuerpo. Pero, ¿cómo funciona realmente?

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En el mundo de las dietas y los trucos caseros para bajar de peso, continuamente surgen métodos novedosos que prometen resultados rápidos y efectivos. Uno de los más recientes es el uso de hielo para acelerar el metabolismo y quemar grasa

El método del hielo para perder peso se basa en la aplicación de frío sobre el cuerpo con el objetivo de activar la termogénesis, el proceso por el cual el organismo quema calorías para generar calor y mantener la temperatura corporal

La idea del "truco" del hielo para perder peso se basa en la premisa de que el cuerpo, al exponerse al frío, debe trabajar más para mantener su temperatura interna. 

Esto se traduce en un aumento del gasto calórico, ya que el organismo utiliza energía adicional para generar calor y una mayor quema de calorías podría contribuir a la pérdida de peso

¿Cómo aplicar el hielo para bajar de peso?

Este enfoque no es un método milagroso ni sostenible para perder peso, aunque puede tener algo de fundamento en la fisiología humana, pero veamos cómo puedes aplicarlo en el día a día.

1. Compresas de hielo

Uno de los métodos más simples y populares es la aplicación de compresas frías directamente sobre áreas del cuerpo donde se acumula grasa, como el abdomen, los muslos o los brazos.

Procedimiento:

  • Coloca varias cubetas de hielo en una bolsa o utiliza una compresa de gel fría.
  • Envuelve la bolsa o compresa en una tela o toalla delgada para evitar el contacto directo del hielo con la piel, lo que podría causar quemaduras.
  • Aplica la compresa sobre la zona deseada durante unos 15 a 20 minutos.
  • Realiza este procedimiento una o dos veces al día.

2. Baños fríos

Los baños con agua fría son otra forma de implementar el método del hielo, promoviendo la activación de la grasa parda.

Procedimiento:

  • Llena la bañera con agua fría, preferentemente a una temperatura entre 15 y 20 grados Celsius. Para aumentar la intensidad, puedes añadir hielo al agua.
  • Sumérgete en la bañera durante 10 a 15 minutos.
  • Alternativamente, puedes hacer una ducha con agua fría si no tienes una bañera. En este caso, lo ideal es realizar la ducha con agua fría durante 3 a 5 minutos, asegurándote de cubrir todo el cuerpo.

3. Crioterapia casera

Este método consiste en enfriar el cuerpo con el uso de trajes o chalecos diseñados específicamente para mantener una baja temperatura durante períodos prolongados.

Procedimiento:

  • Existen chalecos o fajas que contienen compartimientos donde se colocan geles fríos o cubos de hielo.
  • El usuario se coloca la prenda por unos 30 a 60 minutos al día.
  • El frío constante sobre el torso y abdomen tiene como objetivo aumentar la actividad de la grasa parda.

Efectos a largo plazo del método del hielo para adelgazar

Aunque consumir hielo o agua fría puede contribuir a un gasto calórico marginal, la cantidad es tan pequeña que no tendrá un impacto significativo en la pérdida de peso. Para perder peso de manera efectiva, es necesario un déficit calórico mucho mayor, lo cual se logra principalmente a través de una combinación de:

  • Alimentación balanceada (reducir la ingesta calórica y elegir alimentos nutritivos).
  • Ejercicio regular (aumentar el gasto calórico mediante actividades físicas).

El truco del hielo puede ser una táctica interesante para aumentar ligeramente el metabolismo, pero no debe considerarse una solución definitiva o suficiente para la pérdida de peso. Los expertos insisten en que una dieta equilibrada y el ejercicio siguen siendo los pilares fundamentales para la pérdida de peso sostenible. 

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