

Con la tensión subiendo en el mundo, Europa y la guerra entre Rusia y Ucrania son uno de los centros más preocupantes. En ese contexto, la invasión de un dron ruso en territorio de la OTAN encendió todas las alarmas.
La maniobra fue considerada una amenaza, ya que Putin puso a prueba a la Alianza Occidental. Una situación similar había sucedido en Polonia días antes.
Mientras los bombardeos entre Putin y Zelenski continúan, estas transgresiones ponen a la OTAN en alerta. La posibilidad de un conflicto abierto está más cerca que nunca.
Un dron ruso voló por espacio aéreo de Rumania
Un dron de Rusia violó el espacio aéreo de Rumanía durante un ataque contra Ucrania este fin de semana. Es la segunda incursión en países miembros de la OTAN y se considera como una escalada de la guerra.

"Es una evidente expansión de la guerra por parte de Rusia, y así es exactamente como actúan. Pequeños pasos al principio, y con el tiempo grandes pérdidas", declaró el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, y agregó: "El ejército ruso sabe exactamente hacia dónde se dirigen sus drones y cuánto tiempo pueden operar en el aire. Sus rutas siempre están calculadas. Esto no puede ser una coincidencia, un error ni la iniciativa de algunos comandantes de bajo rango".
Así fue la incursión de un dron ruso en Rumania
El dron se adentró 10 kilómetros en territorio rumano y operó en el espacio aéreo de la OTAN durante unos 50 minutos. El dispositivo no sobrevoló zonas habitadas y no se reportaron daños ni heridos, según informó el Ministerio de Defensa rumano.
Rumanía, que comparte una frontera de 640 kilómetros con Ucrania, envió dos aviones de combate. Además, advirtió a los residentes del sureste del país que se refugiaran.
Polonia advierte por acciones "no vistas desde la Segunda Guerra Mundial"
La semana pasada, Polonia se vio obligada a derribar drones rusos que entraron en su espacio aéreo, en lo que el ejército calificó de una amenaza "sin precedentes". "No tengo motivos para afirmar que estamos al borde de la guerra, pero se ha cruzado una línea, y es incomparablemente más peligrosa que antes", declaró el primer ministro polaco, Donald Tusk.

"Esta situación nos acerca más a un conflicto abierto que no hemos visto desde la Segunda Guerra Mundial", advirtió. El ejército polaco busca reforzar sus filas ante el temor a la agresión militar rusa y miles de polacos se han inscrito en entrenamiento militar voluntario.









