

A pesar de haberse frenado el ingreso de vehículos chinos en territorio brasileño, el país asiático se convirtió en 2012 en el país que más exporta a Brasil. China tomó este año el lugar que históricamente era de Estados Unidos, y los economistas consideran que permanecerá allí durante mucho tiempo.
El liderazgo deriva de un cambio estructural de largo plazo en la pauta de exportación de China. Además, el aumento de las inversiones chinas en Brasil empujará en los próximos años el comercio dentro de las compañías, todavía reducido entre brasileños y chinos.
En 2002, China era el séptimo proveedor más importante de Brasil en el mercado internacional, respondiendo por 3,3% de las importaciones brasileñas. Desde entonces, la participación china en los productos que ingresaron a Brasil aumentó cada año. En los primeros nueve meses de 2012, China alcanzó un 15,2% de participación, con R$ 25.100 millones.
En el mismo período, Estados Unidos vendió a Brasil un total de R$ 23.800 millones. Ese país que tenía una participación de 21,8% hace diez años, hoy tiene un 14,4% de las importaciones brasileñas. Los datos son del ministerio de Desarrollo, Industria y Comercio Exterior (Mdic).
Welber Barral, ex secretario de comercio exterior, dijo que la variedad de productos que China exporta a Brasil se diversificó mucho más que la de los estadounidenses. En 2002, aviones, helicópteros y sus partes, además de turborreactores estaban entre los principales productos que los brasileños compraban a Estados Unidos.
Esos bienes continúan entre los más importantes en la lista de lo que se importa del país del norte de América. Por otro lado, hace diez años el coque y la hulla estaban entre las importaciones brasileñas más representativas de origen chino. Actualmente, esos productos dieron lugar a las manufacturas, como electrónicos y sus partes, además de material de transporte.
El comercio entre Brasil y Estados Unidos cambió menos porque depende más del comercio al interno de las compañías, aseguró Barral. Las exportaciones chinas a Brasil reflejan, en cambio, la diversificación de producción que tuvo lugar en el país asiático.
Barral estimó que los chinos continuarán liderando la exportación a Brasil, principalmente cuando maduren las inversiones del país asiático en territorio brasileño. Además de la diversidad de productos que exportan los chinos, la corriente de comercio entre Brasil y China sumará los intercambios dentro de la misma compañía. Según datos del Renai, organismo del Mdic, China fue en 2011 el décimo segundo país que anunció más inversiones en Brasil, concentrando el 3,8% de esos anuncios el año pasado.
El avance chino con el comercio al interno de una compañía se intensificará de manera acelerada en los próximos años, dijo José Augusto de Castro, vicepresidente de la Asociación de Comercio Exterior de Brasil (AEB). El ritmo será alto porque las inversiones chinas estarán en crecimiento, muy diferente de las inversiones estadounidenses, que casi todos ya maduraron.
De Castro también llamó la atención sobre el cambio de productos exportados por el país asiático. Las ventas de China al exterior, que antes eran de productos de bajo valor agregado, se hicieron más sofisticadas, con más intensidad tecnológica. Las importaciones de China no son más de bisutería, o productos textiles y de calzados. Hoy importamos bienes de capital chinos, sostuvo.
Datos del Mdic muestran que en 2002 los bienes de capital representaron 13,4% de las importaciones brasileñas made in China. Esa participación avanzó y actualmente alcanza el 23,4%. Los bienes intermedios, que eran 67,3% hace una década, actualmente representan 56,6%.
Ese avance de China en los productos más intensivos en tecnología, inclusive máquinas y equipamientos, fue propiciado por el crecimiento del país asiático a un ritmo muy superior del promedio exactamente en los últimos diez años, dijo De Castro. Estados Unidos, al contrario, registró un punto alto de crecimiento cerca de 2002 y varias empresas enviaron producción a territorio chino, por el bajo costo de mano de obra y otros factores de producción.










