

El dólar vuelve a estar en la mira: las potencias de Oriente buscan desafiar el dominio económico de Estados Unidos y ya trabajan en un nuevo orden mundial. Con China y Rusia a la cabeza, el plan apunta a redibujar el mapa financiero global con mecanismos propios y sin depender de la divisa estadounidense.
La propuesta presentada en una cumbre internacional suma apoyos y despierta preocupación en Occidente. Con el respaldo de países del llamado "Sur Global", se plantea una arquitectura que, de consolidarse, podría reducir el rol del dólar en el comercio y abrir la puerta a un sistema multipolar.

¿Cuál es el plan de China y Rusia para un nuevo orden mundial?
Durante la cumbre de la Organización de Cooperación de Shanghái (OCS) en Tianjin, China y Rusia detallaron su iniciativa para financiar un esquema alternativo al modelo dominado por Estados Unidos. El presidente Xi Jinpingpidió rechazar la hegemonía, impulsar un multilateralismo "real" y priorizar a los países en desarrollo.
El proyecto incluye la creación de un banco de desarrollo de la OCS y un paquete de 2.000 millones de yuanes (280 millones de dólares) en subvenciones para los miembros este mismo año. Además, China ofreció 10.000 millones de yuanes en préstamos para reforzar la cooperación regional.

¿Cómo impacta este movimiento en el dólar y Estados Unidos?
El nuevo esquema financiero busca reducir la dependencia del dólar en los intercambios internacionales y consolidar un bloque multipolar con mayor autonomía. Al sumar instituciones propias y financiamiento directo, China y Rusia se posicionan como ejes de un orden alternativo que atrae cada vez más países no alineados con Occidente.
Este giro multipolar representa un desafío estratégico para Estados Unidos, que ve cómo su divisa y sus instituciones pierden terreno frente a propuestas respaldadas por potencias emergentes. El dólar, aunque sigue siendo la moneda dominante, enfrenta así uno de los cuestionamientos más importantes de las últimas décadas.











