Las familias de víctimas y estudiantes de la masacre en la escuela secundaria de Miami, Florida, Marjorie Stoneman Douglas, vivieron este viernes un momento muy emotivo. Comenzó la demolición del edificio donde murieron 17 personas en un tiroteo en 2018.
Ellos le aseguraron a EFE que "es un alivio indescriptible que los ayudará a respirar mejor". La demolición del edificio 1200, donde ocurrió el tiroteo a manos de Nikolas Cruz, un exalumno, sucede después de seis años de ser preservado por razones legales, pues fue usado durante el juicio, a pesar de los pedidos de las familias de derribarlo.
