Fuente: Archivo
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El presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, reafirmó sus controvertidas promesas de campaña durante una entrevista en "Meet the Press" de NBC, asegurando que deportará a todos los inmigrantes indocumentados.
Además, insistió en su intención de poner fin a la ciudadanía por nacimiento, incluso explorando la posibilidad de hacerlo mediante una orden ejecutiva.
Plan de deportación masiva: países rechazan colaborar
El equipo de transición de Trump propuso a gobiernos como el de Bahamas, Panamá e Islas Turcas y Caicos que acepten migrantes deportados desde Estados Unidos cuyos países de origen se nieguen a recibirlos. Sin embargo, dichas naciones han rechazado categóricamente esta iniciativa.
- Bahamas calificó la propuesta como inaceptable, asegurando que no habrá más conversaciones al respecto.
- Panamá negó haber recibido contacto oficial y subrayó que no está obligada a aceptar deportados de otras nacionalidades.
- Islas Turcas y Caicos destacó su derecho soberano a decidir quién puede residir en su territorio.
Impacto y desafíos del plan migratorio de Trump
Trump, que asumirá la presidencia el 20 de enero, planea implementar un programa de deportaciones masivas que podría desplazar a miles de migrantes a países donde no tienen ningún vínculo.
Además, su retórica antiinmigrante durante la campaña vinculó a los migrantes con un aumento en la delincuencia, alimentando el debate sobre su postura migratoria.
Reacciones internacionales y el futuro de los migrantes
El ambicioso plan genera interrogantes sobre las condiciones en que los migrantes deportados podrían vivir en países terceros y qué medidas podría tomar la administración Trump para forzar la aceptación de estas personas.
Con esta estrategia, Trump avanza en su promesa de campaña de endurecer las políticas migratorias, pero enfrenta una creciente resistencia tanto dentro como fuera de Estados Unidos.