Los concesionarios no saben qué hacer para atraer clientes. La época en la que sólo con prender la luz del salón de ventas era suficiente para comercializar 3.500 unidades en un rato apenas hace un año atrás hoy parece lejana. Con 2.800 patentamientos por día, los dueños de las concesionarias de 0 km ya están pensando en cómo van a afrontar la segunda mitad del año.
Y la fuerte caída de las ventas en mayo reafirma esta situación. Según el informe mensual de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (Acara) el mes pasado se vendieron 55.931 unidades. La cifra muestra una baja del 39% comparada con el mismo mes de 2013, cuando se patentaron 92.387 vehículos.
Asimismo, el acumulado de los primeros cinco meses fue de 328.709 unidades, mostrando una caída de 22% en la comparación contra igual período del año pasado en el que se vendieron 425.461 vehículos.
Para Abel Bomrad, presidente de Acara es necesaria la aplicación de alguna medida reactivadora como reacción a esta nueva realidad, a la que los concesionarios hemos tenido que adaptarnos rápidamente. En ese sentido vamos a seguir trabajando arduamente, junto a los demás eslabones del sector, para recuperar y volver a tener un mercado interno fuerte con un horizonte auspicioso.
Quien alertó un poco más sobre las consecuencias negativas que tendría para el sector que no se modifique el rumbo fue Alberto Príncipe, presidente de la Cámara de Comercio Automotor (CCA). De acuerdo con los cálculos del sector, las concesionarias deberán reducir su empleo en un porcentaje similar al de la caída de sus ventas, advirtió durante una entrevista televisiva. El titular de la entidad que agrupa a los concesionarios de autos usados aseguró que si la actividad en el sector no comienza a repuntar, estimo que los locales deberán comenzar a despedir gente en el corto plazo. Su predicción no tiene tanto que ver con la venta de los usados, que aún se mantiene, sino con la comercialización de unidades nuevas importadas, mercado que casi no se moverá este año. De hecho, estiman un mercado de 650.000 unidades para el 2014.
El segmento de los importados, dentro de la caída generalizada que estamos viviendo, es el que presenta mayores dificultades, analizó un hombre fuerte del sector de los concesionarios. Puede ser que tenga razón que haya despidos en ese segmento porque casi no se va a mover este año, agregó.
Respecto de lo que puede llegar a suceder con los concesionarios de 0 km, en el seno de la entidad entienden que llegó el momento de reducir estructuras. Los concesionarios van a tratar de tomar medidas tendientes a protegerse de los costos fijos, pero antes del personal van a ir por las estructuras, van a empezar a cerrar salones de ventas que son alquilados para reducir el peso de los impuestos como agua, luz, teléfono, conexión a internet, y van a tratar de reubicar a sus empleados, agregó la misma fuente.
En el sector aseguran además que aún no van a empezar con despidos de personal porque les cuesta caro capacitarlos. Cada empleado tiene un costo de u$s 15.000, aseguran. Igual, advierten que si la tendencia se mantiene en el segundo semestre va a ser difícil no despedir.
Respecto de las posibilidades de que el Gobierno anuncie un programa de incentivos que empuje las ventas, desde la entidad admitieron la existencia de reuniones pero aclararon que aún no nos comunicaron la intención de hacer algo.
Se quejaron de que el concesionario está sólo, y nadie le va a dar ninguna solución, ni siquiera las fábricas que no tomaron una sola decisión en materia de defender el mercado interno.