En esta noticia

Muchas personas consideran que someter los alimentos a temperaturas extremadamente bajas hace que duren más tiempo. Sin embargo, en muchos casos, está práctica puede ser simplemente un mito.

El congelador puede alterar tanto el sabor como la textura de ciertos alimentos, y en algunos casos, puede introducir cambios que podrían tener consecuencias graves sobre nuestra salud.

Es fundamental conocer qué alimentos no deben ser congelados y cómo protegerlos de manera adecuada para mantener su calidad.

Estos son los alimentos que JAMÁS debes congelar

La congelación es una técnica útil para preservar alimentos, pero no todos los productos se comportan igual cuando se almacenan en el freezer.

A continuación, te explicamos qué alimentos no debes meter en el congelador, junto con las razones por lo cual es mejor evitarlo.

  • Verduras. Si colocas algunas verduras en el congelador sin prepararlas, pueden volverse granulosas. Para evitar este problema, es fundamental cocinarlas en agua hirviendo con sal durante aproximadamente 5 minutos.
  • Hortalizas. Las hortalizas contienen alrededor del 70% de agua, lo que hace que se marchiten cuando son congeladas.
  • Frutas. Algunas frutas tienen un alto contenido de agua que puede afectar negativamente su valor nutricional si se congelan.
  • Huevos. Congelar huevos crudos no es recomendable, ya que el líquido dentro del huevo se expande a bajas temperaturas, lo que puede hacer que explote.
  • Mayonesa. La mayonesa no debe ser congelada. La mezcla de grasa y agua en su composición puede provocar que se descomponga, resultando en un producto inadecuado para el consumo.

Qué alimentos se deben congelar si o si

No existe una regla estricta de "alimentos que se deben congelar sí o sí". La necesidad de congelar un alimento depende más bien de tu estilo de vida, las cantidades que compras y tus hábitos de consumo.

Sin embargo, hay ciertos alimentos que comúnmente se congelan para extender su vida útil:

  • Carnes y aves. Congelar carnes y aves, ya sea crudas o cocidas, es una práctica ampliamente recomendada para preservar su frescura y evitar su deterioro.
  • Pescados y mariscos. La congelación es crucial para mantener la frescura y el sabor de pescados y mariscos. Este método también es eficaz para prevenir el crecimiento de microorganismos que podrían deteriorar estos productos.
  • Productos de panadería. Congelar ciertos productos de panadería es una solución práctica para evitar que se endurezcan y pierdan su frescura.
  • Salsas y sopas. Las salsas y sopas pueden ser congeladas para facilitar la preparación de comidas rápidas en el futuro.

Cómo descongelar un alimento de forma correcta

Entender cómo descongelar alimentos de manera correcta es fundamental para preservar su calidad. A continuación, te explicamos de qué manera debes hacerlo.

En el refrigerador

Coloca el alimento en un recipiente para recoger cualquier posible líquido y ponlo en la parte más baja del refrigerador. Dependiendo del tamaño del alimento, el proceso puede tardar hasta un día.

Este método mantiene el alimento a una temperatura segura, lo que minimiza el riesgo de crecimiento bacteriano

En agua fría

Coloca el alimento en una bolsa de plástico hermética para evitar que el agua entre en contacto con él. Luego, sumerge la bolsa en un recipiente con agua fría, cambiando el agua cada 30 minutos.

Este método es más rápido. De hecho, suele tardar entre 1 y 3 horas, aproximadamente. Sin embargo, el alimento debe cocinarse inmediatamente después de descongelarse para evitar el crecimiento bacteriano.

En el microondas

Utiliza la función de descongelación del microondas, que ajusta la potencia para evitar que el alimento se cocine mientras se descongela.

Este es el método más rápido, pero puede empezar a cocinar el alimento en los bordes. Por lo tanto, es importante cocinar el alimento inmediatamente después de descongelarlo.