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La nueva disposición anunciada por la presidenta Claudia Sheinbaum marca un cambio importante en el sistema financiero. A partir de este decreto, bancos como BBVA,Santander y HSBC ya no podrán trasladar a los clientes más comisiones ni incrementos en tasas de interés bajo el pretexto de cubrir pagos al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB).

Esta medida busca que los costos operativos de las instituciones financieras no recaigan en los contribuyentes ni en los usuarios, sino que sean absorbidos directamente por los bancos, reforzando la responsabilidad del sector.

A partir de ahora los bancos de México no podrán hacer esto

La nueva disposición fiscal establece que los bancos ya no podrán descontar de sus impuestos los pagos que realizan al Instituto para la Protección al Ahorro Bancario (IPAB). Antes de esta medida, las instituciones financieras podían usar esos pagos como una deducción fiscal, lo que en la práctica significaba que parte de ese gasto era absorbido por el Estado con recursos públicos.

Claudia Sheinbaum calificó esta práctica como un "exceso", porque permitía que los bancos redujeran su carga fiscal trasladando indirectamente ese costo a los contribuyentes.

Con la reforma, los bancos deberán asumir plenamente ese gasto sin apoyo fiscal, lo que los obliga a buscar nuevas formas de organizar sus operaciones y mantener su rentabilidad.

Sin embargo, el decreto también establece que no podrán compensar esta pérdida aumentando comisiones o elevando las tasas de interés que pagan los usuarios.

Impacto en las ganancias del sector financiero

De acuerdo con datos oficiales, en 2024 los bancos en México obtuvieron ganancias aproximadas de 288,000 millones de pesos. Con la aplicación de la nueva normativa, se calcula que las utilidades conjuntas se reducirán en alrededor de 10,000 millones de pesos, quedando aún con márgenes de rentabilidad muy altos en comparación con otros países.

Este recorte busca alinear a México con estándares internacionales, donde este tipo de deducciones no son comunes, como en Estados Unidos o Canadá.

Beneficio directo para los consumidores

Uno de los puntos más relevantes de la medida es que los bancos ya no podrán justificar incrementos en comisiones ni intereses para compensar la pérdida de la deducción fiscal. Esto significa un alivio directo para los clientes, quienes no verán un aumento en los costos de sus productos financieros por esta causa.