Polémica en el Vaticano | El Papa Francisco aseguró que "los Santos no son héroes..."
Para que comiences el día con la guía de Dios, conoce cuál son los versículos de la Biblia para este viernes.
Con el propósito de que los creyentes dispongan fácilmente de las enseñanzas divinas, la Santa Sede difunde cada día en su sitio web oficial fragmentos de la Sagrada Escritura junto con las reflexiones del máximo representante de la Iglesia Católica, el papa Francisco.
La palabra de este viernes, 1 de noviembre de 2024 incluye el relato de los capítulos de la Biblia, los versículos y la interpretación del pontífice Jorge Mario Bergoglio.
Los versículos bíblicos para este viernes 1 de noviembre
Aunque la Sagrada Escritura tenga una antigüedad considerable, el mensaje de Dios siempre ofrece apoyo y orientación para nuestro día a día. Por tanto, es fundamental recordar los siguientes pasajes de Apocalipsis:
Primera lectura: Apocalipsis 7, 2-4. 9-14
Yo, Juan, vi a un ángel que venía del oriente. Traía consigo el sello del Dios vivo y gritaba con voz poderosa a los cuatro ángeles encargados de hacer daño a la tierra y al mar. Les dijo: "¡No hagan daño a la tierra, ni al mar, ni a los árboles, hasta que terminemos de marcar con el sello la frente de los servidores de nuestro Dios!" Y pude oír el número de los que habían sido marcados: eran ciento cuarenta y cuatro mil, procedentes de todas las tribus de Israel.
Vi luego una muchedumbre tan grande, que nadie podía contarla. Eran individuos de todas las naciones y razas, de todos los pueblos y lenguas. Todos estaban de pie, delante del trono y del Cordero; iban vestidos con una túnica blanca; llevaban palmas en las manos y exclamaban con voz poderosa: "La salvación viene de nuestro Dios, que está sentado en el trono y del Cordero".
Y todos los ángeles que estaban alrededor del trono, de los ancianos y de los cuatro seres vivientes, cayeron rostro en tierra delante del trono y adoraron a Dios, diciendo: "Amén. La alabanza, la gloria, la sabiduría, la acción de gracias, el honor, el poder y la fuerza, se le deben para siempre a nuestro Dios".
Entonces uno de los ancianos me preguntó: "¿Quiénes son y de dónde han venido los que llevan la túnica blanca?" Yo le respondí: "Señor mío, tú eres quien lo sabe". Entonces él me dijo: "Son los que han pasado por la gran persecución y han lavado y blanqueado su túnica con la sangre del Cordero".
Segunda lectura: Primera Carta de Juan 3, 1-3
Queridos hijos: Miren cuánto amor nos ha tenido el Padre, pues no sólo nos llamamos hijos de Dios, sino que lo somos. Si el mundo no nos reconoce, es porque tampoco lo ha reconocido a él.
Hermanos míos, ahora somos hijos de Dios, pero aún no se ha manifestado cómo seremos al fin. Y ya sabemos que, cuando él se manifieste, vamos a ser semejantes a él, porque lo veremos tal cual es.
Todo el que tenga puesta en Dios esta esperanza, se purifica a sí mismo para ser tan puro como él.
El capítulo de la Biblia para el viernes 1 de noviembre
Evangelio según Mateo 5, 1-12
En aquel tiempo, cuando Jesús vio a la muchedumbre, subió al monte y se sentó. Entonces se le acercaron sus discípulos. Enseguida comenzó a enseñarles, hablándoles así:
"Dichosos los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los cielos. Dichosos los que lloran, porque serán consolados. Dichosos los sufridos, porque heredarán la tierra. Dichosos los que tienen hambre y sed de justicia, porque serán saciados. Dichosos los misericordiosos, porque obtendrán misericordia. Dichosos los limpios de corazón, porque verán a Dios. Dichosos los que trabajan por la paz, porque se les llamará hijos de Dios.
Dichosos los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los cielos. Dichosos serán ustedes, cuando los injurien, los persigan y digan cosas falsas de ustedes por causa mía. Alégrense y salten de contento, porque su premio será grande en los cielos".
La palabra del papa Francisco para el viernes 1 de noviembre
El Papa Francisco, durante la celebración de la solemnidad de Todos los Santos, destacó la santidad como un "don" y un "camino" en la vida cristiana. En su reflexión, subrayó que la santidad es un regalo de Dios que se recibe en el Bautismo y que, si se cultiva, puede transformar radicalmente nuestras vidas.
"Los santos no son héroes inalcanzables o lejanos, seguro que hemos conocido a algunos de ellos, algún santo cotidiano, alguna persona justa, alguna persona que vive la vida cristiana en serio, con simplicidad", señaló Francisco.
Además, el Papa invitó a los fieles a ver la santidad como un camino compartido, donde la comunidad juega un papel fundamental en el crecimiento espiritual. Al referirse a la alegría que trae el recibir un don, Francisco resaltó que la santidad nos conecta con el amor de Dios y nos brinda la oportunidad de vivir una vida plena y feliz, apoyándonos mutuamente en el camino hacia la santidad.
Compartí tus comentarios