

El fallecimiento de un familiar trae consigo no sólo el dolor por la pérdida de un ser querido, sino también la preocupación por los asuntos relacionados con uno de los temas más complejos de tratar: la herencia. Cuando el debate se da en el territorio azteca, el eje del conflicto puede verse posicionado en los ahorros que se tengan en las Administradoras de Fondos para el Retiro (Afore) y la designación de herederos.
Miles de cuentas individuales permanecen inactivas año tras año, mientras que los familiares desconocen los pasos que deben seguir para reclamar los recursos acumulados por su ser querido. Si bien las Afores han sido creadas para garantizar una pensión digna al concluir la vida laboral, el destino de ese dinero puede cambiar drásticamente cuando no se dejó constancia de los beneficiarios.
Según destaca la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), este error resulta más común de lo que parece. Una de las entidades gubernamentales más importantes de México en materia de pensiones, como lo es el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) confirma que desde el momento en que se cotiza, cada trabajador genera una cuenta individual donde se deposita su ahorro para el retiro. Pero la gran pregunta surge cuando esa persona fallece: ¿quién puede acceder a esos recursos si no hay un nombre registrado?
Afore y beneficiarios legales: quiénes pueden quedarse con los ahorros
De acuerdo con el artículo 501 de la Ley Federal del Trabajo (LFT), los beneficiarios legales del titular fallecido son, en primer lugar, su viuda o viudo, siempre que este último haya dependido económicamente del trabajador. En caso de que no existiese cónyuge, el derecho pasa a la concubina o concubinario, y en su ausencia, a los ascendientes directos que dependieran económicamente del trabajador fallecido.

En la lista de posibles herederos, también se incluyen los hijos menores de 16 años, o mayores si estudian hasta los 25 años o no pueden mantenerse por sí mismos. Estos parámetros buscan proteger a las familias más cercanas, asegurando que el dinero ahorrado regrese a quienes realmente lo necesitan.
Afore: qué sucede si no se dejó una lista de herederos
En caso de que el titular no haya registrado beneficiarios ni herederos, el reclamo de los recursos de la Afore debe realizarse ante un Tribunal Laboral Federal. Este procedimiento, conocido como juicio de reconocimiento de beneficiarios, permite determinar legalmente quién tiene derecho a recibir los fondos.
Según la Consar, este proceso puede extenderse entre cuatro meses y un año, dependiendo de la documentación y la carga de trabajo del tribunal. Una vez emitida la sentencia, la Afore correspondiente debe entregar los recursos en un plazo máximo de 15 días hábiles.
Por eso, las autoridades recomiendan que todos los trabajadores registren formalmente a sus beneficiarios desde hoy, ya que no solo evita conflictos legales, sino que garantiza que los ahorros construidos durante toda una vida de trabajo no queden en el olvido.













