

Gaseosas, conservas, comidas y hasta especias: cada vez es mayor la cantidad de productos que vienen en latas de aluminio. Y no se trata de una percepción sin fundamento: por año se tiran más de 80 mil millones de latas de bebidas en todo el mundo. Y aunque el aluminio es 100% reciclable, también puedes reciclar tus latas en casa. E incluso, hasta ganar dinero.
Sucede que solo el 65% de las latas de aluminio logra volver al ciclo de producción. El resto, se pierde. ¿Qué tal si aportas tu granito de arena y las reciclas tu mismo?
Latas de aluminio y reciclaje: hay mucho que puedes hacer

Afortunadamente, el aluminio es un material que puede reciclarse de manera indefinida sin perder calidad. Por eso es una opción económica y al mismo tiempo sostenible. Un dato importante si se tiene en cuenta la necesidad de reducir la cantidad de residuos que generamos.
Cuando colaboras en el reciclaje de latas de aluminio separando y clasificando tus residuos, contribuyes a que ese material regrese al mercado convertido en un objeto nuevo. Desde vehículos, aviones, herramientas y envases: todos ellos pueden contener aluminio reciclado.
Pero del mismo modo en que las grandes compactadoras pueden reciclar aluminio, tú puedes darle un nuevo uso a tus latas convirtiéndolas en nuevos elementos. Veamos 6 formas fáciles.
Una por una, 6 formas sencillas de reciclar tus latas de aluminio

No, no vamos a decirte que reutilices tus latas con maquinaria especializada. De manera sencilla, con materiales que puedes tener en tu casa, podrás reutilizar tus latas.
- Haz macetas decorativas:
Lava bien la lata, hazle orificios en la parte inferior para el drenaje del agua. Puedes hacerlos con un punzón o con un clavo y un martillo. Antes de agregarle tierra decórala a tu gusto. Utiliza acrílicos preferentemente y una vez bien seco, podrás colocar tu planta. Prefiere suculentas que requieren menos riego y quedan bonitas en las ventanas.
- Prepara tus propios candelabros y lámparas caseras:
De seguro has visto esas pequeñas luces LED que se utilizan para ambientar espacios pequeños con tonalidades cálidas y muchas veces con diferentes diseños. Si buscar lograr ese efecto, solo debes hacer perforaciones en tu lata -con un clavo y un martillo- a excepción de la base, pues allí colocarás tu velita o luz. Si te animas, sigue un patrón específico o realiza un diseño para que se proyecte sobre la pared.
- Crea campanas de viento:
Reúne varias latas de diferentes tamaños, píntalas a tu gusto, hazles un orificio en el fondo y únelas con un cordón. Al colgarlas en exteriores, el viento creará sonidos suaves y agradables.
- Anímate a armar comederos para aves:
Si cuentas con algún frutal en tu casa y las aves suelen acercarse, puedes ayudarlas en primavera y verano creando un comedero para ellas. Solo deberás hacer dos orificios enfrentado en una lata de boca ancha. Haz dos orificios en la parte superior de la lata, pasa una cuerda resistente, rellena con alpiste y cuelga el comedero en un árbol .
- Haz tus propios lapiceros y organizadores de cocina:
Esta es de seguro la forma más conocida pero no por ello deja de ser válida. Pinta las latas y utilízalas como porta lápices, cucharas o utensilios. Son ideales para mantener el orden en escritorios o cocinas pequeñas sin gastar dinero.
- Vende las latas y gana un ingreso extra:
Si prefieres no reutilizarlas, puedes juntar varias latas, alcanzar el kilo y venderlo en centros de acopio. Aunque el ingreso es modesto, ayuda al bolsillo y al planeta.
Recuerda que Incorporar el reciclaje en tu vida cotidiana no solo es una práctica responsable, también puede ser una actividad creativa y hasta rentable. El aluminio es uno de los materiales más valiosos y sostenibles que existen, y cada acción cuenta.













