

En los últimos meses, Hacienda ha reforzado su vigilancia sobre los movimientos en efectivo, especialmente los realizados en cajeros automáticos.
Aunque no hay un límite legal absoluto para retirar dinero, las operaciones superiores a ciertos importes activan alertas fiscales automáticas que podrían derivar en investigaciones o sanciones.
Por eso, es fundamental tener en cuenta qué cantidades de dinero podrían generar una revisión fiscal, qué sanciones podrían aplicarse y cómo respaldar una operación de manera correcta y sin problemas.
¿Cuál es el monto que no deberías sacar del cajero?
En México, no hay una cifra exacta de dinero que se prohíba retirar del cajero. Sin embargo, desde un enfoque fiscal, el SAT puede solicitar explicaciones si detecta movimientos en efectivo que superen los 15,000 pesos, sobre todo si el patrón de conducta no coincide con los ingresos declarados del contribuyente. A partir de esa cifra, los bancos están obligados a reportar la operación.
Además, retiros frecuentes de montos cercanos al límite o retiros divididos para evitar controles también pueden ser detectados como intentos de evasión.
Por eso, aunque no sea ilegal, es importante actuar con cautela y mantener el respaldo documental adecuado.
¿Qué pasa si Hacienda detecta movimientos sospechosos?
Cuando el SAT identifica operaciones inusuales en cuentas bancarias, puede iniciar una revisión para verificar el origen del dinero. Esto no significa automáticamente una sanción, pero sí puede implicar que el titular de la cuenta deba justificar el retiro con facturas, contratos o comprobantes.

Si no se puede comprobar el origen del efectivo, la autoridad fiscal puede aplicar multas que van desde el 20% hasta el 150% del monto en cuestión, dependiendo del tipo de infracción. Además, los fondos podrían quedar retenidos mientras se realiza la auditoría.
Estas medidas buscan prevenir delitos financieros, como el lavado de dinero, y reforzar la transparencia en el manejo de recursos. Por eso, es clave contar con registros claros y actuar dentro de los márgenes legales, aun si se trata de operaciones personales.
Cómo evitar sanciones por retiro de efectivo
La mejor forma de evitar problemas con la Hacienda es evadiendo movimientos en efectivo que no puedas justificar fácilmente. Si necesitas retirar una suma alta, asegúrate de contar con documentos que acrediten el origen y destino del dinero. Esto puede incluir recibos de nómina, comprobantes de venta o estados de cuenta anteriores.
Otra recomendación espriorizar los pagos por transferencia o tarjeta, ya que dejan un rastro digital verificable. También es útil hablar con tu banco para conocer los límites diarios de retiro y, si es necesario, solicitar un incremento temporal con aviso previo.
Finalmente, nunca fracciones un retiro grande en varios menores con el fin de evadir controles. Esa práctica, conocida como "pitufeo", también está vigilada por las atoridades fiscales y puede considerarse un intento deliberado de elusión.















