

La administración de Donald Trump implementó una nueva medida que afectará a millones de visitantes extranjeros que deseen ingresar a Estados Unidos.
A partir de ahora, todos los solicitantes de visas de no inmigrante deberán pagar una tarifa extra de 250 dólares, conocida como "tarifa de integridad de visa".
Esta decisión, aprobada en la reciente ley presupuestaria, representa un cambio sustancial en los costos asociados con el proceso de solicitud de visas americanas.

Qué es la "tarifa de integridad de visa" y a quiénes afecta este nuevo cargo
A partir de 2025, Estados Unidos aplicará un nuevo cargo extra de 250 dólares denominado "tarifa de integridad de visa" a todos los solicitantes de visas de no inmigrante. Este cobro se suma a las tarifas ya vigentes y abarca categorías como:
- Visas de turista (B-2)
- Visas de negocios (B-1)
- Visas de estudiante (F-1, M-1)
- Visas de trabajo temporal
- Otros permisos de residencia temporal
La medida tiene como objetivo, según el Departamento de Estado, reforzar el cumplimiento de las condiciones migratorias.
Cuándo y cómo se paga la tarifa de 250 dólares: condiciones para obtener reembolso
El pago será obligatorio en el momento de la emisión de la visa americana, sin posibilidad de exención por motivos económicos.
De todas formas, una de las particularidades de esta política es que contempla un sistema de reembolso: aquellos solicitantes que respeten los plazos de estadía autorizados y abandonen el país dentro del período legal, podrán solicitar la devolución del monto.

La tarifa de visa se ajustará automáticamente por inflación y podría subir con el tiempo
Otra característica relevante de la medida es su ajuste automático por inflación, lo cual significa que el monto de 250 dólares no será fijo.
A lo largo de los años, este valor podrá incrementarse en función de los índices inflacionarios que determine el Departamento de Seguridad Nacional.
Además, esta entidad tendrá la autoridad legal para modificar o aumentar la tarifa según las necesidades presupuestarias o políticas de cada administración.
En la práctica, esto implica que el costo total de tramitar una visa para ingresar a EE.UU. podría elevarse de forma sostenida en el tiempo, afectando cada vez más a quienes deseen viajar.















