El presidente Jair Bolsonaro despidó a su jefe de Gabinete, Onyx Lorenzoni y le ofreció la Casa Civil –tradicionalmente liderada, precisamente, por civiles– al general Walter Souza Braga Netto, reforzando el 'ala militar' del gobierno.
De confirmarse Braga Netto –actual jefe de Gabinete del Ejército y máximo responsable de la intervención federal en Río de Janeiro–, sería el sexto ministro (de 22) que proviene del ejército, fuerza con la que Bolsonaro se siente afín siendo él mismo un capitán retirado. La nominación, no obstante, provocó recelo por parte de otras fuerzas, especialmente la Armada, que se sienten con desventaja en la repartición de poder.
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Pero el hecho de que Braga Netto todavía no haya aceptado la invitación de Bolsonaro obligó al gobierno a evaluar otros dos candidatos: el jefe del Comando Militar del Sur, el general Antônio Miotto, y el comandante del 1° Distrito Naval, Almirante Flávio Rocha. El nombramiento de cualquiera de los tres, implica una definición en términos de fortalecer el ala militar del gobierno de Bolsonaro, que venía perdiendo poder frente al sector liderado por los hijos del presidente brasileño.
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Lorenzoni, había caído en desgracia luego de que su segundo, Vicente Santini, fuera destituido por Bolsonaro por usar un avión de la Fuerza Aérea Brasileña para viajar a India. Bolsonaro, sin embargo, sigue respaldando a Lorenzoni –que desde hace años es un defensor fiel del presidente– y probablemente le reserve el Ministerio de Ciudadanía, actualmente ocupado por Osmar Terra.
