El Kremlin anunció este sábado la detención de 11 personas, entre ellas cuatro asaltantes, por el atentado en una sala de conciertos cerca de Moscú que fue reivindicado por el grupo ISIS y por el cual Putin apuntó a Ucrania. Hasta el momento se notificaron 133 víctimas fatales y más de 140 heridos.
El ataque se produce tras una serie de amenazas y supone una represalia de la organización yihadista ante la participación de Rusia en los conflictos de Siria y del Sahel africano.
Los servicios de seguridad rusos (FSB) afirmaron en las últimas horas que los sospechosos "tenían contactos" en Ucrania, donde planeaban huir.
"Tras cometer el atentado terrorista, los criminales tenían previsto cruzar la frontera entre Rusia y Ucrania y tenían contactos adecuados del lado ucraniano", indicó el FSB, citado por la agencia estatal TASS.
Rusia reforzó la seguridad en aeropuertos y estaciones y en toda la capital, una vasta área urbana de más de 21 millones de personas.
La advertencia de Estados Unidos
Hace dos semanas, la Embajada de Estados Unidos en Rusia había alertado que "extremistas" tenían planes inminentes de un ataque en la capital Moscú.
La información había sido adelantada por uno de los agentes de Inteligencia estadounidense.
La Casa Blanca expresó el viernes que las imágenes del tiroteo en la capital rusa eran difíciles de ver. "Las imágenes son simplemente horribles y difíciles de ver y nuestros pensamientos obviamente estarán con las víctimas de este terrible, terrible ataque a tiros", dijo el portavoz de la Casa Blanca, John Kirby.
Putin, reelegido el domingo pasado para un nuevo mandato de seis años, envió miles de tropas a Ucrania en 2022 y advirtió en repetidas ocasiones que varias potencias -incluido Occidente- están tratando de sembrar el caos dentro de Rusia.
Putin clama venganza por el atentado
El presidente ruso, Vladimir Putin, condenó este sábado el "bárbaro" atentado y clamó venganza contra los que encargaron dicho ataque.
"Todos los autores, organizadores y los que encargaron este crimen recibirán un merecido e inevitable castigo, sean quienes sean e independientemente de que los hayan enviado", dijo Putin en una alocución televisiva, En ningún momento de su discurso mencionó la reivindicación del grupo yihadista Estado Islámico, difundida el viernes por la noche.
El presidente ruso afirmó que los cuatro atacantes detenidos por este ataque habían intentado huir a Ucrania.
Los sospechosos detenidos, dijo, "se dirigían a Ucrania donde, según los datos preliminares [de los investigadores] se había preparado una 'ventana' para que pudieran cruzar la frontera".
Ucrania a su vez ha desmentido cualquier implicación en el ataque.