
La triple frontera cuenta con una nueva modalidad de custodia. Se trata de drones (aviones no tripulados) que Brasil utiliza para operaciones encubiertas contra el tráfico de drogas y del contrabando de armas. De hecho, la policía brasileña adquirió dos nuevos modelos para vigilar el área, según el diario La Nación de Paraguay.

Ambos drones llegaron a Brasil en 2010 a un costo de 80 millones de reales, según el periódico paraguayo.
Por otra parte, según
, el país vecino adquirió otros dos aviones no tripulados más por 48 millones de reales y serían utilizados durante la Copa Confederaciones y para las zonas fronterizas.
A fines de 2012 la policía brasileña utilizó estos aviones para el seguimiento de un buque sospechoso en el estado brasileño de Paraná, según informa este medio.











