
Se llama Rex y tiene todo para ser un hombre: corazón, sangre, nariz, piernas, boca y ojos. Pero no es humano, sino un robot construido en un laboratorio. Se trata del hombre biónico más completo fabricado hasta ahora.
Expuesto en el Museo de la Ciencia de Londres, y con un valor de 600 mil euros, estará a la vista del público hasta finales de marzo, con el objetivo de demostrar que la tecnología es capaz de construir determinadas partes del cuerpo humano.











