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El papa Francisco continúa internado en "estado crítico" en el hospital Gemelli de Roma, tras habérsele diagnosticado una neumonía bilateral que luego lo llevó a tener una insuficiencia renal leve y una trombocitopenia.

A pesar de la situación compleja de salud que está atravesando el santo padre, según el Vaticano confirmó que el sumo pontífice mantiene un buen estado de ánimo y continúa con algunas de sus tareas de la Iglesia católica.

El último mensaje del papa Francisco

En una publicación de X, el papa Francisco agradeció todos los mensajes de aliento y las oraciones destinadas a que se mejore pronto y que continúe con sus funciones de rutina en la Santa Sede.

"En estos días me han llegado muchos mensajes de afecto y me han impresionado especialmente las cartas y dibujos de los niños. ¡Gracias por esta cercanía y por las oraciones de confortación que he recibido de todo el mundo!", escribió el máximo representante de la Iglesia católica en X.

Por otro lado, les envío una exhortación a todos los fieles a que sigan en alegría a pesar de la situación y el grave estado de salud que padece ahora el Papa.

"Los exhorto a continuar con alegría su apostolado y a ser, como nos sugiere el Evangelio de hoy, signo de un amor que abraza a todos, que transforma el mal en bien y genera un mundo fraterno. ¡No tengan miedo de 'arriesgar el amor'!", destacó Francisco.

"El Papa Francisco agradece a todo el pueblo de Dios que se ha reunido para rezar por su salud en estos días", comunicaron desde la oficina de prensa del sumo pontífice.

La reciente actividad que tuvo el papa Francisco

Por la mañana recibió la Eucaristía, y por la tarde reanudó su trabajo", destacaron en una nota de prensa emitida por el Vaticano. Además, el comunicado informó que por la noche, el santo padre llamó al párroco de Gaza para expresarle su cercanía paterna.

Por otro lado, en la mañana del domingo el santo padre había asistido a la Santa Misa que se brindó en la décima planta del hospital. Allí el Papa estuvo presente junto a quienes lo cuidaron durante los días de internación.

Qué dice el último parte médico del papa Francisco

Según el comunicado del hospital Gemelli, las condiciones clínicas del santo padre en su estado crítico muestran una ligera mejoría. "Tampoco hoy se han producido episodios de crisis asmática respiratoria; algunas pruebas de laboratorio han mejorado", remarca el último parte oficial.

En cuento al seguimiento de la insuficiencia renal leve indicaron que "no es motivo de preocupación" y afirmaron que la "oxigenoterapia continúa", aunque con un flujo y un porcentaje de oxígeno ligeramente reducidos.

"Los médicos, en vista de la complejidad del cuadro clínico, son prudentes y aún no dan a conocer el pronóstico", indicaron.

Czarek Sokolowski.

Los comunicados previos del Vaticano sobre la salud del Papa

El Papa "ha transcurrido bien" la noche, ha "dormido y está descansando", informó la prensa oficial del Vaticano en el parte médicodel domingo. También destacaron que el sumo pontífice aún recibe transfusiones de sangre y se le sigue administrando oxígeno para apoyar su respiración.

"El estado del Santo Padre sigue siendo crítico; sin embargo, no ha vuelto a tener crisis respiratorias desde anoche. Se sometió a las dos unidades de hematología concentrada con beneficio y un retorno del valor de hemoglobina", informaron.

Además, indicaron que se trombocitopenia se ha mantenido estable; sin embargo, algunos análisis de sangre muestran una insuficiencia renal inicial, leve, que está bajo control.

A su vez, indicaron que el papa Francisco continúa la oxigenoterapia de alto flujo a través de cánulas nasales "El Santo Padre continúa vigilante y bien orientado. La complejidad del cuadro clínico, y la espera necesaria para que las terapias farmacológicas den algún resultado, hacen que el pronóstico siga siendo reservado".

Qué dice el evangelio del 24 de febrero

Lectura del santo evangelio según san Marcos:

Marcos 9, 14-29

En aquel tiempo, cuando Jesús bajó del monte y llegó al sitio donde estaban sus discípulos, vio que mucha gente los rodeaba y que algunos escribas discutían con ellos. Cuando la gente vio a Jesús, se impresionó mucho y corrió a saludarlo.

Él les preguntó: "¿De qué están discutiendo?" De entre la gente, uno le contestó: "Maestro, te he traído a mi hijo, que tiene un espíritu que no lo deja hablar; cada vez que se apodera de él, lo tira al suelo y el muchacho echa espumarajos, rechina los dientes y se queda tieso. Les he pedido a tus discípulos que lo expulsen, pero no han podido".

Jesús les contestó: "¡Gente incrédula! ¿Hasta cuándo tendré que estar con ustedes? ¿Hasta cuándo tendré que soportarlos? Tráiganme al muchacho". Y se lo trajeron. En cuanto el espíritu vio a Jesús, se puso a retorcer al muchacho; lo derribó por tierra y lo revolcó, haciéndolo echar espumarajos. Jesús le preguntó al padre: "¿Cuánto tiempo hace que le pasa esto?" Contestó el padre: "Desde pequeño. Y muchas veces lo ha arrojado al fuego y al agua para acabar con él. Por eso, si algo puedes, ten compasión de nosotros y ayúdanos".

Jesús le replicó: "¿Qué quiere decir eso de 'si puedes'? Todo es posible para el que tiene fe". Entonces el padre del muchacho exclamó entre lágrimas: "Creo, Señor; pero dame tú la fe que me falta". Jesús, al ver que la gente acudía corriendo, reprendió al espíritu inmundo, diciéndole: "Espíritu mudo y sordo, yo te lo mando: Sal de él y no vuelvas a entrar en él". Entre gritos y convulsiones violentas salió el espíritu. El muchacho se quedó como muerto, de modo que la mayoría decía que estaba muerto. Pero Jesús lo tomó de la mano, lo levantó y el muchacho se puso de pie.

Al entrar en una casa con sus discípulos, éstos le preguntaron a Jesús en privado: "¿Por qué nosotros no pudimos expulsarlo?" Él les respondió: "Esta clase de demonios no sale sino a fuerza de oración y de ayuno".