Un equipo internacional de la Universidad de Tübingen, el Centro Senckenberg para la Evolución Humana y el Paleoambiente y la Universidad Nacional de Colombia encontraron evidencia genética de una población temprana previamente desconocida.
Los análisis revelan que estos antiguos habitantes del altiplano alrededor de Bogotá vivieron hace más de 6000 años y desaparecieron por completo hace aproximadamente 2000 años. El hallazgo se realizó mediante el estudio de genomas antiguos extraídos de huesos y dientes humanos hallados en cinco sitios arqueológicos.
Encuentran restos de la civilización más antigua de Sudamérica: ¿qué hallaron los científicos?
La investigación fue publicada en la revista Science Advances y ofrece nuevas claves sobre el poblamiento inicial del continente sudamericano. "Estos son los primeros genomas humanos antiguos de Colombia que se publican", explicó el profesor Cosimo Posth, autor principal del estudio.
Los investigadores analizaron el material genético de 21 individuos de cinco sitios arqueológicos en el altiplano colombiano. Entre ellos, se destacan los restos más antiguos procedentes de Checua, ubicado al norte de Bogotá, a unos 3000 metros sobre el nivel del mar.
Estos individuos pertenecían a una pequeña comunidad de cazadores-recolectores que habitaron la zona hace aproximadamente 6000 años. "Nuestros resultados muestran que los individuos de Checua derivan de la población más temprana que se extendió y se diferenció en América del Sur muy rápidamente", señaló Kim-Louise Krettek, primera autora del estudio.
Lo sorprendente es que el material genético de estos primeros pobladores desapareció por completo. "No pudimos encontrar descendientes de estos primeros cazadores-recolectores del altiplano colombiano, los genes no se transmitieron. Es decir, en los alrededores de Bogotá hubo un intercambio completo de la población", agregó.
¿Qué significa este nuevo descubrimiento?
El estudio sugiere que, tras la desaparición de estos primeros habitantes, una segunda migración llegó desde América Central, trayendo consigo cambios culturales y tecnológicos.
"Además de los desarrollos tecnológicos como la cerámica, es probable que los habitantes de esta segunda migración también trajeran las lenguas chibchas a lo que hoy es Colombia", explicó Andrea Casas-Vargas, coautor e investigador de la Universidad Nacional de Colombia.
Casas-Vargas también remarcó que este reemplazo total de la población es un fenómeno inusual en Sudamérica: "Hasta ahora, se ha observado una fuerte continuidad genética en la población de los Andes y el cono sur de América del Sur a lo largo de largos períodos de tiempo y cambios culturales"
"Y así fue también en las poblaciones que siguieron a los cazadores-recolectores en el Altiplano de Bogotá hasta la llegada de los conquistadores europeos hace unos 500 años, aunque en esta región hubo un cambio cultural masivo con el desarrollo de la cultura muisca", concluyó.
Sin embargo, los científicos advierten que la genética no debe confundirse con identidad cultural. "La disposición genética no debe ser vista como igual a la identidad cultural", aclaró Posth. En respeto a las comunidades locales, el equipo científico colaboró con la Guardia Indígena Muisca antes de concluir el estudio: "Valoramos la riqueza del conocimiento comunitario", subrayó.
¿Cuál es la civilización más antigua del mundo?
La civilización más antigua registrada en la historia de la humanidad no se encuentra en América. Se trata de los sumerios, quienes surgieron en el sur de Mesopotamia hacia el 4100 a.C.
Los sumerios desarrollaron una avanzada organización social, introdujeron la escritura cuneiforme, establecieron las primeras ciudades como Ur y Uruk, y crearon sistemas para medir el tiempo que aún perduran.
Su legado incluye innovaciones en irrigación, arquitectura y administración, además de relatos como el Diluvio Universal y la Epopeya de Gilgamesh, considerada el poema épico más antiguo del mundo. Aunque esta civilización cayó debido a invasiones y problemas ambientales, su influencia sobrevivió en culturas posteriores como la babilónica y asiria.