

El nuevo escenario laboral es, sin lugar a dudas, uno de los asuntos que más quitaron el sueño a los empresarios en lo que va de 2006. Fallos rimbombantes, proyectos de reforma y opiniones encontradas convirtieron a esta temática en una de las más calientes del año.
Para repasar algunos de los temas más candentes, El Cronista y la Universidad Austral organizaron un seminario el 20 de septiembre en el Hotel Meliá, donde se dieron cita algunos de los más destacados especialistas en la materia.
Después de la apertura, a cargo de Juan Confalonieri, profesor de la Austral, empezó la puesta al día. Luis Ramírez Bosco, titular del estudio homónimo, expuso sobre la necesidad de que los empresarios asuman una posición en el nuevo escenario laboral. “No hay una posición empresaria en materia laboral , disparó a modo de inicio, logrando despabilar a los asistentes. Explicó que con esa actitud resulta imposible sostener una relación más o menos normal entre empresarios y trabajadores.
Y afirmó que, ante la actitud pasiva del empresariado, que sólo acierta a resistir frente a aquello que se le solicita, pero nunca reclama o realiza acciones proactivas, la posición de árbitro que detenta el Gobierno indefectiblemente queda más cerca de los sindicatos. “A falta de posición de una de las partes, el árbitro nada puede hacer , señaló. Según el especialista, en Argentina aspiramos a que sea el Gobierno quien ponga límites a los trabajadores y se encargue de decirles “No .
Luego fue el turno de Ricardo Foglia, del estudio Rossi Camilión & Asociados y profesor de la Universidad Austral, quien clarificó el proyecto de reforma de la Ley de Riesgos del Trabajo, tema que preocupa sobremanera al empresariado.
Señaló que en la ley vigente, las alícuotas percibidas por las ARTs son destinadas a afrontar en primer lugar prestaciones dinerarias, luego prestaciones médicas y, por último, a sostener la administración del sistema.
Sin embargo, de aprobarse el pr
oyecto elaborado por el Ministerio del Trabajo, los últimos dos ítems se invierten, perdiendo densidad entonces lo destinado a prestaciones médicas. En cuanto a la prevención, se delega al empleador, aumentando los costos. A manera de conclusión señaló: “Es una inversión de la lógica de un sistema de daños, que en lugar de reforzar o gastar más plata en prevención o en prestaciones médicas, se la gasta en indemnizaciones, que es lo más ineficiente pues significa que el daño ya se produjo . En síntesis, una vuelta atrás a la Ley 9.688 pero con un costo mucho más alto.
Como último disertante del primer panel, Julio Cordero, gerente de Legales de Techint, se refirió al ius variandi y sus restricciones a la plena utilización de la fuerza de trabajo. En ese sentido, destacó la importancia del ius variandi como elemento esencial del contrato de trabajo y motor de la relación jurídica moderna, y señaló que es fundamental para que exista continuidad en el contrato de trabajo.
“Si entendemos que el contrato de trabajo es un ámbito de expresión personal y de manifestación creativa del trabajador, el juez debe interpretar que todo debe ser analizado en armonía, porque si no el trabajador va a encontrar una salida buscando una indemnización que en última instancia perjudica a la sociedad toda , afirmó al referirse a la posición que debe tomar la jurisprudencia.
Y con relación a los límites de esta figura y al deber de colaboración y solidaridad previsto en el Artículo 62 de la Ley de Contrato de Trabajo (LCT), refirió que la frase “No me corresponde esgrimida por un sinfín de trabajadores resulta altamente perniciosa y atenta contra todos los deberes laborales. “Transforma al trabajador en una máquina que no puede moverse de una específica y estrecha actividad , sostuvo. A modo de síntesis, señaló que los empresarios no tienen una posición contraria a los trabajadores, ya que si el barco no llega a puerto, todos se hunden. “Pero eso no quita la obligación del derecho de acompañar el ciclo natural del trabajador, que nadie puede negar que lo tiene , concluyó.
Coffee break mediante, comenzó el segundo panel con la exposición de Jorge García Rapp, del estudio Ramírez Bosco & Asociados, centrada en el impacto de las reformas en el Sistema Previsional. Haciendo un análisis del panorama nacional de los últimos tiempos, se desprende que durante las épocas de mayor inflación hubo un importante aumento de la litigiosidad. “Eso es porque en muchos casos el Gobierno, en forma deliberada, abonaba las prestaciones erróneamente , aclaró.
Con relación al ahorro previsional, que en definitiva implica diferir salarios, fue muy gráfico: “Si no me como el sándwich hoy, lo como más tarde. Y lo que estamos haciendo es comernos el sándwich hoy, con las consecuencias nocivas para al trabajador , sentenció. En cuanto al financiamiento del Sistema Previsional, indicó que se encuentra en crisis, ya que es sostenido en partes iguales por impuestos y aportes.
Para confirmarlo dio un dato alarmante: mientras que en la actualidad el 33% de los mayores de 65 años no tiene cobertura, en el 2050 el índice llegará al 50 por ciento. Además, señaló que debido a las últimas medidas del Gobierno, aunque el sistema tiene superávit, puede estar sumamente comprometido.
Para todos los asistentes fue una sorpresa contar con Jorge Rodríguez Mancini entre los conferencistas, quien centró su ponencia en la validez y eficacia de los acuerdos ante el S.E.C.L.O. Analizó en detalle el fallo “Vivas c/Peugeot de la Sala 5º de la Cámara de Apelaciones del Trabajo, sobre el que aclaró que no debería dársele la excesiva trascendencia que se le ha dado, ya que otra Sala, en un caso similar, falló de manera contraria.
“Sería bueno tener un plenario en esta cuestión, pero la Cámara laboral es reacia a las convocatorias para tal fin , indicó. Además, destacó que se trata de un caso muy particular que no debe extrapolarse y aconsejó leer el voto del Dr. Simón, el cual relativiza la posición, adecuándola a la situación propia del caso.
“En algunos tribunales existe la tendencia a establecer, a través de los fallos, doctrinas que quieren extender al resto de los casos. Esto es inadmisible en este tipo de tribunales , disparó en una clara crítica al voto del Dr. Zas, dejando en claro que son los tribunales supremos quienes tienen esta función. Renglón seguido, alertó la obligación de la Suprema Corte de Justicia (SCJN) de fallar sobre la base del consecuencialismo.
A su turno, Carlos San Millán, del estudio Sánchez Herrera, expuso sobre la responsabilidad de los Directores por deudas laborales y previsionales. Fue elocuente al señalar que muchas veces los jueces laborales fallan de manera equivocada por simple desconocimiento del Derecho Comercial. Y siguiendo esta línea, comentó que en los fallos laborales condenatorios de administradores y accionistas se les extendió la responsabilidad, contrariando el espíritu y la finalidad prevista por los reformadores del Artículo 54 de la Ley de Sociedades (LS). “Además, se viola el derecho de defensa, ya que los condenados no son escuchados, lo que provoca estupor , declaró. Como corolario, sostuvo que estos fallos ahuyentan las inversiones que tanto necesita el país.
El tercer panel comenzó con las palabras de Enrique Navarra, de Navarra & Asociados, sobre los sistemas de remuneración y los últimos acuerdos salariales. Informó que en el primer semestre se homologaron aproximadamente 200 convenios, de los cuales el 90% corresponden sólo a acuerdos salariales. Sus declaraciones fueron contundentes. razonable pensar en un 2007 caliente en esta cuestión , adelantó. También aseguró que los sindicatos se harán fuertes en el reclamo salarial, con la anuencia del Gobierno por ser un año electoral. “Por eso, como meta el empresariado se debe ocupar de levantar la discusión total del marco laboral, exigiendo que se incluyan otros puntos en la discusión , alentó.
Y concluyó que como exigencia de mínima los empresarios deberían modificar los convenios obsoletos íntegramente. “Sólo el que empuja llega a algo, por eso los empresarios deben tener tracción , comentó en un todo de acuerdo con lo dicho durante la mañana por Ramírez Bosco.
Oscar Pirroni, juez de la Cámara Nacional de Apelaciones del Trabajo, se ocupó de las relaciones entre la Justicia y la prensa, admitiendo que la relación entre ambos resulta cuanto menos, regular. Y señaló que el periodismo no debe olvidar que es formador de opinión y nunca debe actuar como juez. También analizó algunos fallos difundidos por los medios, criticando los copetes utilizados por algunos. “Muchas veces el trabajador actúa de una determinada manera en su quehacer laboral, confundido por las noticias de los diarios, que suelen ser equívocas , afirmó.
El bloque concluyó con la exposición del ex juez laboral Jorge Bermúdez, que se ocupó de un tema que interesó mucho: el mobbing y la discriminación. Para un auditorio no acostumbrado a esta figura, sus alcances resultaron alarmantes. También despertó comentarios el hecho de que este fenómeno aún no tenga una respuesta jurídica específica en el ámbito laboral.
“Debe pensarse en una tutela preventiva antes que en una reparatoria, ya que esto último significa que el daño ocurrió , indicó. Y dejó a todos preocupados al afirmar que el empleador ante un caso de mobbing no está cubierto por la ART.
Después de un nuevo break, comenzó el cuarto panel, en el que Miguel Abdelnur se refirió a los proyectos de reforma laboral en curso: “Las modificaciones que se están proyectando y algunas que ya se concretaron son hacia el pasado, en la idea errada de que éste fue brillante .
Con esas palabras dejó sentado su punto de vista. Como reformas más significativas se refirió a la eliminación del tope indemnizatorio por despido, que introduce un nuevo problema: sólo beneficia a los trabajadores de más alto rango y resulta casi imposible de pagar para muchas PyMEs. Además, y como preocupante, explicó que hay intención de ir eliminando progresivamente los beneficios sociales, que pasarían a integrar la remuneración. “De esta manera, lo único que se va a lograr es que los empleadores los eliminen y no se preocupen por el bienestar del trabajador , concluyó.
Carlos María Del Bono encaró uno de los temas más ríspidos: el régimen de fiscalización sancionatorio e impugnatorio en materia de recursos de la seguridad social. Explicó el procedimiento administrativo y judicial de impugnación, que hasta que se sancionó la última LCT, según su opinión, tenía sus complicaciones pero no era oscuro. Y detalló el procedimiento especial a raíz de las facultades concurrentes que se reconoce al Ministerio del Trabajo y la Seguridad Social en la materia. “Espero que todos éstos sean temas que no les toque tratar a menudo , comentó risueño dada la complejidad de la cuestión.
Confalonieri trató el tema de la contratación, la subcontratación y la tercerización. Para él, estas figuras no son novedosas, aunque sí lo es la asiduidad con que las empresas recurren a ellas. “A diferencia de lo que ocurría hace años, la empresa de hoy no trabaja hacia adentro sino hacia afuera y recurre al dependiente sólo cuando es estrictamente necesario , señaló.
De ahí la preocupación de la doctrina laboralista en la cuestión. Remarcó que todo proceso de contratación o subcontratación es un proceso lícito. “No hay presunción de fraude , recalcó. Analizando el Artículo 30 de la LCT, señaló que el empleador se expone en el ámbito del contrato de trabajo a quedar bajo el efecto de la solidaridad, pero ésta no proviene de una presunción de fraude sino como una tutela a los trabajadores.
Además, y con respecto a los alcances del primer párrafo de ese artículo, señaló que la CSJN, si bien hizo esfuerzos en dar certezas, no pudo hacerlo ya que es imposible. Para finalizar, dejó un útil consejo a los empresarios: que tengan mucho cuidado con el contratista y que cumplan a rajatabla con su obligación de control. “Elegir contratistas serios y vigilarlos para que sigan siéndolo , recomendó.
La segunda parte del mismo artículo, que trata acerca de la obligación de control de parte del contratante sobre el contratista fue analizada por Diego Romeo, de Arizmendi S.A. Este tema genera resquemor en los empresarios. “La ley pretende de un empresario privado funciones de contralor, con una eficacia que la AFIP misma no tiene , disparó. Y comentó que si el empresario quisiera realmente efectuar el control de la manera que lo exige la primer parte del artículo, deberá exceder en mucho lo que enumera la segunda parte, y exigir en consecuencia infinidad de documentación. Muy práctico, brindó varios consejos puntuales sobre la materia, que sin duda ayudarán a los empleadores a minimizar los riesgos que asumen al contratar o subcontratar.
El cierre estuvo a cargo de la vice ministra de Trabajo, Noemí Rial, quien destacó las políticas más importantes implementadas durante la actual gestión. Entre ellas, hizo hincapié en la batalla librada contra el trabajo no registrado, indicando que lograron bajar el índice en tres puntos. “Igual, un 43 o 44% de trabajo fuera del sistema sigue siendo alto , afirmó. Por eso, el objetivo del Gobierno es llevarlo al 40% para fin de año.
Como otra medida importante, mencionó la gran cantidad de establecimientos inspeccionados, que llegan a los 180.000. Aquí, el objetivo del Gobierno es llegar a inspeccionar los 700.000 que tienen entre cinco y 10 empleados, pues en la mayoría de los casos tienen alto porcentaje de trabajadores “en negro .
“Cada vez que hago un operativo bajo los niveles de desocupación , comentó con picardía.
Y con relación al trabajo doméstico, remarcó que con el nuevo plan de regularización se inscribieron UN millón de trabajadores. Sin embargo, aunque la vedette sigue siendo el conflicto se mostró optimista, ya que mientras en 2005 se firmaron 600 acuerdos, en lo que va del 2006 esa cifra ya ha sido superada.
Por último, y en franca contraposición con lo augurado por Navarra, aseguró que el 2007 va a ser un año con menos conflictividad y con salarios acordados. “Y aunque podemos sostener que ha habido una importante recuperación salarial, la puja por los salarios continuará , concluyó.










