Las principales empresas del mundo están revitalizando su concepción acerca de la gestión de la cadena de abastecimiento (supply chain management, en inglés) que, en muchos casos, representa el 70% de los costos operativos totales e integra, por lo menos, la mitad de sus activos. Esta etapa del negocio incluye todas las actividades relacionadas con el flujo y la transformación de bienes y productos, desde la materia prima hasta el consumidor final.
Mientras que antes sólo era considerada como un costo, las nuevas exigencias y características del mercado la convirtieron en otro eslabón donde se puede y se debe agregar valor a los distintos productos.
“Antes, los empresarios miraban la cadena de suministro como un costo, ahora la ven como una unidad de negocio , dice Pat Byrne, especialista mundial de la consultora Accenture, que participó de un encuentro con más de 50 empresarios locales y presentó el último estudio sobre el tema que fue realizado con datos de 600 de las empresas más grandes del mundo.
El 89% de los ejecutivos entrevistados para el informe consideró que el proceso de la cadena de abastecimiento es crítico o, por lo menos, muy importante para sus empresas o industrias.
¿Pero dónde reside lo estratégico de esta área? Según el informe, las variables para analizar su performance son tres: por un lado, la rotación del inventario; en segundo término, el costo de los bienes vendidos y, finalmente, el retorno sobre los activos.
La clave parece estar en el diseño de una solución operativa e integrada, situación que –según el estudio– muchas empresas no se toman verdaderamente en serio. En todos los casos que fueron resueltos con éxito, la implementación de la tecnología cumplió un rol protagónico.
Según las conclusiones del estudio de Accenture, las empresas que transformaron sus cadenas de abastecimiento “duplicaron su posibilidad de convertirse en líderes en el manejo financiero en sus respectivos sectores .
“Las exigencias y velocidad del mercado, como los modelos justo a tiempo y los pedidos por Internet hicieron que la cadena de abastecimiento se volviera una habilidad crítica y se transformara en una herramienta del front-office (los que están de cara al cliente) , explica Byrne, que asegura que una correcta tercerización de partes de este proceso puede ayudar a acortar los tiempos del proceso y efectivizar las tareas.
Sin embargo y a pesar de estas nuevas características estratégicas, la reducción de costos sigue siendo un objetivo primordial. Cerca del 65% de los encuestados respondió que ese fue su principal objetivo a la hora de reestructurar sus procesos de suministro. De todos modos la nueva tendencia se nota: cerca de un 25% eligió mejorar ingresos como la opción que lo movió a realizar cambios.
Después de la góndola
El estudio de Accenture hace hincapié en el cada vez mayor margen de contribución que generan los productos después de ser vendidos. “El servicio de posventa y el soporte se convierten en algo tan importante como el producto mismo , describe el informe. Si la cadena de distribución falla, la empresa no sólo perdería la venta del producto sino todos estos ingresos adicionales. En efecto, poco más del 60% de los encuestados dijo que es necesario mejorar la performance de la cadena para mejorar la calidad del servicio, la innovación del producto y expandir el número de canales de venta y el tamaño del mercado.