Para ganar una mejor tasa, las tesorerías de las multinacionales están pasando sus fondos de money market hacia plazos fijos, porque ahora la diferencia es muy grande, ya que los depósitos a 30 días rinden 36%, contra 26% de los fondos de inversión, pero arman depósitos escalonados cada siete días para tener liquidez semanal. "La Tamar está en 34%, más rendimiento pero menos liquidez. Un T+1 rinde entre 31 y 32% con liquidez en 24 horas", revelan en las mesas. Lo cierto es que hace dos meses y medio el BCRA se corrió de los pases activos, eliminando lo que funcionaba como techo para la tasa a un día. Y en dos semanas, con la eliminación de las LEFI, la tasa tampoco tendrá piso. "Vamos, entonces, a un mercado de tasas más volátil, salvo que el Gobierno opere en el mercado de Lecap cortas de una manera previsible y sistemática. Sin esa certeza, seguramente los bancos reemplacen algo de las LEFI con encajes a tasa 0 (lo que pegará en el margen financiero)", dicen. "Considerando el volumen que se opera hoy en el mercado secundario de Lecap cortas (apenas más de $1 billón por día) y en las cauciones: unos $7 billones al día, pero en un mercado donde el money market es el colocador; tener presente también que para un banco la caución colocadora paga ingresos brutos", revelan los analistas de la consultora 1816. Señalan que los cambios de política monetaria impactarán no solo en el negocio bancario, sino también en el de los fondos comunes de inversión: la tasa a un día que reciben los money market (vía remu o caución) es hoy el equivalente al 80% de la tasa de repo entre bancos, dado el encaje diferencial de 20%. Pero el BCRA anunció que unificará ese encaje con el que tiene el resto de los depósitos a la vista, lo que recortará el rendimiento de los FCI T+0, un desafío para la industria. El impacto final de todas estas medidas en las tasas (las que reciben los bancos y las que reciben los FCI) dependerá de lo que vaya haciendo el Gobierno, que tiene margen para influir en rendimientos tanto en el mercado primario de Lecap (Mecon) como en el secundario (BCRA). Hasta aquí, el equipo económico muestra prioridad en controlar el spot (para contener la inflación) y usa todas las herramientas a su alcance (manejo de retenciones, de tasa e intervención en futuros). La cuenta corriente devengada fue deficitaria en más de u$s 5000 millones en el primer trimestre, confirmando que, con este tipo de cambio, el país necesita mucho ingreso de capitales para cumplir con los vencimientos de deuda. Lo cierto es que la pendiente negativa de la curva en pesos refleja una visión general de marcada desaceleración de la nominalidad de la economía. "Por otro lado, las tasas breakeven de inflación y devaluación -las tasas que dejan indiferente a un inversor ante la elección de distintas opciones de inversión- parecen relativamente altas si se asigna probabilidad de ocurrencia a ese escenario proyectado", subrayan desde Quantum, la consultora dirigida por Daniel Marx. Agregan que el dato de inflación mensual de 1,5% en mayo fortalece de alguna manera esa visión: "En este sentido, posicionamientos en instrumentos a tasa fija, como Lecap y Boncap, con extensión gradual de duration, aprovechando las relativamente altas tasas actuales, parece ser la estrategia para perfiles de inversión menos propensos al riesgo".